Con el nuevo acuerdo logrado, "las Farc están reconociendo nuestra institucionalidad"

Desde Londres, donde participaba en la Cumbre Mundial Anticorrupción, el presidente Juan Manuel Santos se refirió al mecanismo para brindar seguridad y estabilidad jurídica al futuro acuerdo de paz y garantizar su cumplimiento conforme al derecho nacional e internacional.

Con el nuevo acuerdo logrado en el marco del proceso de paz que se adelanta en La Habana, "las Farc están reconociendo nuestra democracia, nuestra institucionalidad, nuestra Constitución, nuestras leyes y los poderes que emanan de esa Constitución", dijo el mandatario.

Para el jefe de Estado, con el nuevo acuerdo se dio un "paso importantísimo" para darles estabilidad y seguridad jurídica a las dos partes. (Lea también: Gobierno y Farc anuncian medidas para brindar seguridad y estabilidad jurídica al acuerdo final)

"A las Farc, por supuesto, les interesa que los acuerdos se mantengan, se garantice que no va a haber cambios, y al Gobierno también, porque al fin y al cabo los acuerdos se hacen entre dos partes, y las dos partes estamos interesadas en que se cumplan: que haya estabilidad y que se garantice su permanencia en el tiempo", señaló Santos.

Juristas con opiniones divididas frente a anuncio de acuerdo en La Habana

El anuncio hecho por Humberto de la Calle de que se lograron acuerdos para blindar jurídicamente los acuerdos de paz que se discuten en La Habana con la guerrilla de las Farc dividió las opiniones de algunos juristas del país.

Mientras que el abogado constitucionalista Víctor Hugo Vallejo asegura que "es contradictorio", porque -a su juicio- este tipo de acuerdos solamente pueden ejercerse si se realizan entre dos Estados, otros creen que es viable y acerca la firma de la paz.

Vallejo asegura que el carácter vinculante de este acuerdo solamente se logra cuando el tratado es firmado entre dos naciones y este no es el caso, ya que las Farc no son más que un grupo armado ilegal.

Para Vallejo, esta iniciativa es contradictoria "porque el Estado no puede equiparar a un grupo de delincuentes como las Farc con un Estado". (Vea también: Centro Democrático: "Acuerdo entre Gobierno y Farc es un golpe de Estado a la democracia").

El exmagistrado José Gregorio Hernández, por su parte, cree que esta es una buena noticia, pero debe verse desde una perspectiva jurídica.

"Yo tengo mis dudas de que el acuerdo final con las Farc sea uno de los acuerdos especiales a que se refiere el Derecho Internacional Humanitario y concretamente el artículo 3 común de los Acuerdos de Ginebra. Pero si es así, debe ser aprobado por el Congreso, mediante Ley, con el debido tiempo, en libertad y previa discusión y después debe ir al control de la Corte Constitucional", dice Hernández, quien agrega que "la mejor forma de blindar esos acuerdos es respetando íntegramente la Constitución" (Vea el video completo aquí).

El constitucionalista Jaime Castro destaca que desde ya se le quiera dar un carácter de tratado internacional a un acuerdo "que nadie conoce porque hasta el momento no lo han suscrito y que no han terminado de negociarlo. Eso equivale prácticamente a un cheque en blanco, prácticamente un salto al vacío".

Castro añade que esta decisión "tiene más consecuencias perjudiciales para el ordenamiento institucional del país que un golpe de Estado, porque han decidido que la suerte del Estado la definen un grupo de personas levantadas en armas que negocian con el Gobierno" (Vea la opinión completa de Jaime Castro aquí).

Por otro lado, el analista político Camilo González Posso asegura que esta propuesta está enmarcada en los Acuerdos de Ginebra, que sí permiten que haya acuerdos entre una Nación y un grupo armado irregular, justamente con el fin de darle continuidad a los pactos de paz en el mundo.

A su vez, el exmagistrado Eduardo Cifuentes cree que la finalidad de lo anunciado por De la Calle es "darle un carácter de compromiso intangible en el nivel internacional y, al mismo tiempo, lograr que sea una norma internacional en Colombia".

Finalmente, el abogado Rubén Darío Henao asegura que se trata de "un paso importante" y que de alcanzarse este objetivo planteado en La Habana, la firma del acuerdo final de paz "podría darse en uno o dos meses porque esto es algo muy viable".

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