Tres policías serán testigos contra otros uniformados en caso grafitero

Un oficial y dos suboficiales involucrados en la investigación por la muerte del joven grafitero Diego Felipe Becerra serán testigos de cargo en la audiencia pública. Los uniformados colaboran con la Fiscalía para esclarecer quién manipuló la escena del crimen colocando un arma en el lugar y haci hacer creer, en una primera investigación, que todo se trató del asalto a un bus de servicio público.

"Ellos decidieron decir la verdad. Están colaborando con la Fiscalía y ya han confirmado que no existía arma en la escena del crimen", aseguró Gustavo Trejos, padre de Diego Felipe.

La Fiscalía en acusación reveló otra versión de un testigo que será pieza clave en la investigación.

"Que cuando el arma llegó se la entregaron aparente mente al abogado Héctor Hernando Ruíz, quien la habría colocado en el sitio y también confirma que altos oficiales estuvieron presentes en la escena del crimen, quienes pese a su responsabilidad y condición de garantes permitieron que esa arma fuera colocada allí", reveló Trejos.

En la audiencia pública fueron acusados cinco oficiales de la Policía y otros seis uniformados entre suboficiales y agentes. Tres civiles también están denunciados penalmente.

"Se van a llamar como testigos a unos doce policías, entre ellos al general Francisco Patiño ya que él tuvo un pleno conocimiento de todo lo que sucedió en la escena del crimen y en el posterior montaje", finalizó el padre del menor asesinado.

En la última sesión de audiencia pública se acumularon cuatro procesos y la Fiscalía pidió una condena de 24 años para los acusados.