El fuerte bombardeo que precedió el abatimiento de 'Cano'
El operativo de infiltración y seguimiento, visual y electrónico, sobre 'Alfonso Cano' tenía un reto: ubicarlo e identificarlo plenamente para dar la orden de ataque.
Noticias RCN
octubre 20 de 2014
01:44 p. m.
01:44 p. m.
Desde hace varios días los helicópteros y aviones bombarderos estaban listos en una base militar cerca de Palmira, esperando la orden de despegue. La gran incógnita era el clima, cambiante y traicionero de la zona donde ya había sido avistado 'Alfonso Cano'.
"Había mal tiempo lo cual no permitía la salida de los helicópteros. Los aviones necesitaban ver muy claramente el objetivo", aseguró el general Juan Pablo Rodríguez, comandante de las Fuerzas Militares.
El asalto aéreo debía darse ese día, el único en que las condiciones de clima eran favorables. "Yo consideré que ya llevábamos mucho tiempo y que la operación no se podía demorar más, por todo el despliegue que había se podía quemar el secreto operacional", precisó el general Rodríguez.
Finalmente, la orden de la operación 'Odiseo' se dio a las 7:30. Según los cálculos, la flotilla aérea del Ejército y de la de Fuerza Aérea debía llegar a la zona del operativo en menos de 40 minutos. El riesgo de que las gruesas nubes volvieran a taponar el cielo era palpable. Varias de las aeronaves contaban con cámaras de video desde las cuales quedó grabado el inicio del vuelo.
Los aviones bombarderos llegarían primero y luego los helicópteros con la tropa, que según los planes debía desembarcar en tierra y tomarse la zona. Los pilotos no solo le temían al clima sino también a los francotiradores de la guerrilla.
Todo el bombardeo quedó grabado en video, principalmente desde las cámaras de los hombres que prestaban vigilancia al campamento desde aproximadamente 900 metros de distancia.
Fueron cinco las bombas que cayeron a los alrededores de las tres casas, la de 'Cano' y las de sus lugartenientes.
Los uniformados que prestaban vigilancia a la distancia también tenían la misión de verificar el momento en que 'Alfonso Cano' saliera de la casa en la que se refugiaba, pues por ordenamiento internacional las viviendas en zona rural no pueden ser bombardeadas bajo ninguna circunstancia.
Al cabo de unos minutos, uno de los militares en tierra avistó a uno de los perros de 'Cano'. Pese a las nubes de humo que envolvieron el lugar, desde su sitio en lo alto de la loma los militares advirtieron una figura difusa colándose entre los árboles y buscando una salida hacia la cuchilla de la montaña. Según ellos, era 'Cano' huyendo del lugar.
Lo que vino después fue una seguidilla de disparos de fusil. Minutos más tarde llegaron los helicópteros con la tropa que apoyaría la operación en tierra. Si era cierto que 'Cano' había huido por la parte alta de la montaña había que perseguirlo por tierra antes de que cayera la noche.
Desde el centro de operaciones en Palmira, los generales al frente de la operación 'Odiseo' comenzaron a temer que el máximo jefe de las Farc se les fuera a escapar de nuevo. "Cuando lanzamos la operación nosotros teníamos un porcentaje del 90 por ciento de que el objetivo estaba en el lugar previsto para el desarrollo de la operación", dijo el comandante de las Fuerzas Militares.
En el bombardeo murieron 'Jennifer', la 'Ranchera' y la misma que se encargaba de sacar a los perros de 'Cano' a cumplir sus necesidades, también murió Daniel Zorro, el radista.
Un primer rastreo de los militares confirmó que 'Cano' no estaba entre los muertos lo que los hizo suponer que había escapado y confirmaba que estaba aún en la zona.
"A esa hora uno empieza a preocuparse y a pensar en que de pronto el terroristas se había volado", dijo el general Rodríguez.
Sin embargo, no perdió las esperanzas del todo y así se lo hizo saber a sus hombres y pidió un nuevo aval para continuar con la búsqueda.
"Recibí una llamada del presidente de la República en la cual me motivó para que continuara con la operación (…) que debía seguir adelante hasta cumplir con el objetivo de la operación", recordó.
En ese momento pasó lo menos esperado. Eran casi las 8:00 de la noche cuando un soldado escuchó movimientos entre la espesura. La orden que había recibido era solo una: disparar si nadie respondía correctamente al santo y seña.
"Nosotros tenemos un santo y seña muy claro para nuestra protección y el hecho de que no se atendiera ese llamado significaba que había un enemigo", reveló el general.
A las 7:45 de la noche el soldado no tuvo más remedio que acatar la orden de los altos mandos y atacar al desconocido que no se detuvo ante sus requermientos. Sin saber de quién se trataba dio aviso a sus superiores.
El muerto era 'Alfonso Cano'.
Vea todos los detalles del bombardeo en el video relacionado.
Juan Carlos Giraldo/NoticiasRCN.com
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