¿Qué piden los maestros del país que están en paro?
Los docentes reclaman que se les suban los sueldos y que se mejore el acceso a los sistema de salud. Gobierno asegura que negociará si regresan a clases.
Noticias RCN
abril 27 de 2015
05:08 p. m.
05:08 p. m.
Tras casi una semana de suspensión de actividades por parte de los maestros de colegios públicos, manifestación que mantiene sin clase al menos a ocho millones de menores de toda Colombia, el panorama futuro no parece nada alentador: miembros de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) insisten en que "es más fácil que un avión en vuelo ponga reversa que el paro se levante si no hay soluciones", mientras que el Gobierno se mantiene en que es necesario dialogar pero mientras los estudiantes están en las aulas, para garantizar el derecho a la educación.
Pero, ¿cuáles son las peticiones que mantienen alejados al gremio de maestros y al Estado colombiano?
De acuerdo con el presidente de Fecode, Luis Gruber, hay cinco puntos clave que buscan ser resueltos en una mesa de negociación con el Ministerio de Educación, en cabeza de Gina Parody: una mejora salarial, la evaluación de competencias, el acceso a la salud, gratuidad en la educación y que se aumenten los años de preescolar de uno a tres.
Hasta el momento, el tema económico es el que mayores desencuentros ha generado entre las dos partes. Mientras el Gobierno dice que está entre sus posibilidades hacer aumentos del 10% a los educadores, estos han respondido que sus necesidades superan ese porcentaje.
"El Gobierno se mantiene en el 10% para la nivelación salarial, pero varios estudios, incluido uno del propio Ministerio de Educación, muestran que el déficit es mayor; también el Gobierno insiste en la atención a la primera infancia y desestima el preescolar de tres grados y tampoco soluciona lo prestacional ni la mala atención de las entidades de salud", dice Gruber.
Según los maestros, no se puede llegar a acuerdos pronto porque no se avanzará en los diálogos en cuanto no se defina el tema de sus salarios. La mayoría sostiene que actualmente están devengando, en promedio, 1,6 millones de pesos, aunque la mayoría cuenta con maestrías.
El principal inconveniente es que los pagos se hacen basándose en los escalafones profesionales que rigen en Colombia y que van desde el 1 al 14, siendo este último el que más pago genera a los docentes, que en este punto pueden recibir salarios de hasta cinco millones. Así que pese a que acumulen experiencia y estudio, si no son promovidos de escalafón, no contarán con un mejor salario.
Más salud para los docentes
Otra de las peticiones de los más de 300.000 profesores que mantienen el cese de actividades en los 32 departamentos del país es que se les brinde un mejor servicio de salud.
La docente Flor Alba Suávita asegura que "es muy triste que nosotros como docentes cuando necesitamos del servicio de salud no contemos con especialistas, rapidez en la asignación de citas o sitios de atención adecuados, entre otros; más aún cuando los descuentos que se nos hacen son muy altos, de ahí nuestra inconformidad, porque no se nos atiende dignamente".
Este punto es, junto a la unificación salarial, uno de los más complejos, ya que según la propia ministra Parody existe un alto nivel de corrupción en el sistema de salud que cubre a los profesores del país y que esto termina afectando el servicio que se presta.
"Los maestros tienen un régimen especial en el que el Gobierno invierte más recursos. El problema es que a la hora de prestar el servicio hay corrupción y el servicio no se está prestando de manera eficaz y eficiente", dice Parody.
La Ministra agrega que como el que presta el servicio no es el Gobierno, se necesita volver ese sistema transparente. "Es gravísimo lo que está pasando. Un régimen que tiene más recursos no se está prestando de manera eficaz y este es un caso dramático y nos muestra qué es lo que está pasando en el sistema de salud".
La jornada única, otro desencuentro
Cumplir con el compromiso de la jornada de ocho horas diarias en los colegios del país se ha convertido en otro de los puntos de desencuentro entre maestros y Gobierno.
Fecode dice que cerca de tres millones de estudiantes que acuden en la jornada de la tarde, nocturna y fines de semana, deberán ser redistribuidos en 3.000 nuevos colegios porque las instalaciones que hoy existen en el país no dan abasto con la demanda de los alumnos.
El problema es que los recursos para las nuevas instituciones no están disponibles para alcanzar los objetivos de la jornada única.
"Falta construir un número significativo de aulas, que superan las 50.000. Faltarían 18 millones de meriendas, nueve millones de almuerzos, los muchachos no pueden estar en una institución haciendo más de lo mismo", explica el presidente de Fecode.
Fecode dice que ellos rechazan que uno de los enfoques implementados por el Gobierno para completar la jornada única es contratar profesores del Sena para reforzar matemáticas, español y ciencias, con miras a que los niños pasen las pruebas Pisa.
El gremio de educadores planteó al Ministerio que la jornada única "debe ser para el arte, la educación física, jornadas literarias, certámenes que integren a los padres y que haya comedores, transporte, licenciados de planta y salarios profesionales".
El educador Luis Fernando Percy apunta que "si bien los maestros estamos de acuerdo con la jornada única, no compartimos la manera como ésta se viene implementado en el país por parte del Gobierno, en tanto que no hay la infraestructura, las condiciones y la organización escolar necesaria para garantizar esta política".
De acuerdo con Fecode, la jordana única requiere al menos 100.000 maestros adicionales.
Posiciones distantes
Por ahora, el levantamiento del paro parece no estar cerca y quienes se movilizaron este lunes en varias ciudades de Colombia piden que su interlocución sea directamente con el presidente Juan Manuel Santos.
"Las conversaciones se reanudarán siempre y cuando sea el presidente el que comience el diálogo", señaló Grubert, quien también pidió al Gobierno un vocero diferente a la ministra de Educación, Gina Parody.
"Lo que yo pido encarecidamente es que no afecten a los niños. Los niños no tienen por qué estar pagando los platos rotos de estas protestas", señaló el jefe de Estado en línea con la posición del Ministerio de Educación, que dice que se negociará con los maestros cuando regresen a sus labores.
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