José Uriel Vargas tuvo la fortuna de poder encontrar hace seis años un riñon compatible. Creía que había vuelto a nacer pero ahora su Eps Medimás se niega a entregarle los medicamentos que exige su nueva condición.
El paciente asegura que debe esperar al menos 90 días para recibir un medicamento que es vital para mantener la salud del órgano trasplantado. Ni tutelando a la entidad todos los meses logra la prestación de este servicio puntual.
Alba Arboleda, integrante de la Fundación Renal y de Trasplantes en Neiva, habló de los riesgos que corre José Vargas por no recibir su tratamiento a tiempo.
"Son tres riesgos, pierden el órgano trasplantado, vuelven a diálisis y arriesgan la vida", asegura la especialista.
Ante la misma situación que padecen numerosos pacientes trasplantados de Medimás y otras eps, usuarios y familiares realizaron un plantón pra exigir respeto por sus vidas.