Hasta el momento se han registrado 13 muertos y 57 heridos por la erupción volcánica en la isla. Entre las cenizas buscan sobrevivientes.
Los habitantes de los pueblos situados al pie del volcán Semeru, en Indonesia, intentaban este domingo recuperar los escasos bienes que les han quedado
Padres con sus hijas traumatizadas, viejos con colchones a cuestas. Agricultores con sus cabras en brazos, vivas de milagro.
Tras la apocalíptica erupción de la víspera, todos están conmocionados y yerran de un lado a otro, en medio de una aldea reducida a la nada.
"De golpe, el cielo se oscureció y luego llegaron la lluvia y los nubarrones ardientes", cuenta Bunadi, un habitante de la aldea de Kampung Renteng
Las cabañas que componen el pueblo se vieron arrasadas por las coladas de lodo ardiente y una lluvia de cenizas y escombros
Las operaciones de rescate continúan pero los habitantes, desesperados, se arriesgan a volver a sus aldeas