Turquía denuncia nueva violación de su espacio aéreo por un avión ruso

Ankara convocó el viernes al embajador ruso para transmitirle su "firme protesta y su condena" por esa incursión, precisó el ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.

El presidente turco Recep Tayyip Erdogan dijo que Rusia enfrentará las consecuencias si continúa tomando "medidas irresponsables" que amenazan a la paz regional y mundial, y agregó que quiere reunirse con su homólogo ruso, Vladimir Putin, sin haber logrado hasta ahora el menor éxito para concretar este encuentro.

"Un Su-34 de la aviación rusa violó el espacio aéreo ayer (viernes) a las 11H46 locales (09H46 GMT)", señaló el texto de la cancillería turca.

El pasado noviembre, el ejército turco derribó un caza ruso en la frontera siria, tras acusarlo de los mismos hechos.

"No comentaremos el tema de las discusiones", explicó un portavoz de la embajada rusa, Igor Mityakov, a la agencia de noticias RIA Novosti, al ser preguntado sobre la convocatoria en la cancillería turca.

Por su parte, la OTAN urgió este sábado a Moscú a "respetar plenamente" el espacio aéreo de sus países miembros, después de la denuncia turca de esta nueva violación de su soberanía.

"Llamo a Rusia a actuar de manera responsable y a respetar plenamente el espacio aéreo de la OTAN", escribió en un comunicado el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg. 

"Rusia debe tomar todas las medidas necesarias para asegurar que estas violaciones no vuelvan a repetirse", agregó.

El incidente ha tensado las relaciones entre ambos países vecinos a su peor nivel desde la Guerra Fría.

Además del incidente militar, ambos países mantienen serias divergencias sobre el rumbo de la guerra en Siria. Moscú apoya abiertamente al régimen de Bashar Al Asad, enemigo de Ankara.

La cancillería turca no indicó el lugar preciso de este último incidente.

"Esta violación es un nuevo y concreto indicador de las acciones de la Federación Rusa para escalar los problemas a pesar de las advertencias de nuestro país y la OTAN", indicó el ministerio.

El año pasado Turquía empezó sus vuelos hacia Siria para bombardear posiciones del Estado Islámico como parte de una campaña internacional contra el grupo yihadista.

El 24 noviembre de 2015, cazabombarderos F-16 turcos abatieron un Sukhoi-24 ruso que sobrevolaba la frontera turcosiria y uno de los dos pilotos murió ametrallado cuando descendía en paracaídas, en tanto el otro fue rescatado por un comando.

Este derribo fue calificado por Putin como una "puñalada en la espalda", y provocó una grave crisis entre Ankara y Moscú, cuyas relaciones eran buenas a pesar de sus diferencias sobre el conflicto en Siria. 

Moscú tomó medidas "simbólicas" de represalia contra Ankara, como reinstaurar la necesidad de solicitud de visado para los ciudadanos turcos que se trasladen a Rusia, recomendar a sus ciudadanos que no viajen a Turquía, e imponer un embargo a algunos productos turcos, en particular frutas y verduras.

Según medios de comunicación turcos, la fuerza aérea turca suspendió sus misiones sobre Siria tras el derribo del caza ruso para evitar nuevos incidentes.