Alcaldía de Bogotá habría pagado por refrigerios que no se entregaron en colegios

Una polémica se suscitó luego de una auditoría que realizó la Contraloría Distrital a la Secretaría de Educación de Bogotá en la que se evidenció que existe una diferencia de 2.222 millones de pesos entre lo facturado y lo señalado en los formatos de entrega de refrigerios escolares durante el 2016.

De acuerdo al informe, más de 640 mil refrigerios escolares no fueron entregados a los niños de colegios oficiales de Bogotá entre abril y noviembre de 2016. La conclusión del documento entregado por la entidad de control, fue el resultado de la auditoría a dos contratos suscritos con la unión temporal Nutrir de Colombia 2016 y Proalimentos Liber SAS por más de 34 mil millones de pesos.

"No se aceptan los argumentos expuestos por la entidad y se configura un hallazgo administrativo con presuntas incidencias fiscales y disciplinarias", detalla el informe de la Contraloría. Además, el ente de control halló que no coinciden los formatos de entrega de refrigerios a los niños con las facturas cobradas por el proveedor.

Por su parte, la Secretaría de Educación de Bogotá señaló que sólo pagaron los refrigerios de los cuales hubo certificación de entrega por parte de la interventoría de la Universidad Nacional y aclaró que pueden darse hechos fortuitos que impiden la cancelación de los pedidos de refrigerios a tiempo.

"Pueden pasar varias cosas: uno salidas pedagógicas que no hayan sido notificadas con la oportunidad debida, entrega de notas, o se presentó un corte de agua que impida que el colegio pueda prestar el servicio", explicó Adriana González, subsecretaria de Acceso y Permanencia del Distrito.