El niño, quien fue víctima de abuso sexual el pasado 31 de diciembre en Bogotá, reconoció y denunció al supuesto agresor.
Aunque el fin de semana fue detenido, horas después el señalado al que la comunidad intentó linchar quedó en libertad.
"Es un niño que no puede vivir su vida normal porque está pensando en qué horas va a aparecer este tipo y va a hacerle daño a él o alguno de los de la familia", señaló de forma anónima un familiar del pequeño.
La familia del afectado les pidió a las autoridades que no permitan que el caso quede en la impunidad.
"Que no hay pruebas (nos dicen), hay que llevar el cepillo de dientes del niño porque en el hospital no hicieron las pruebas que tenían que hacer".
En el sector donde fue raptado el niño hay otras denuncias de crímenes similares.