¡El poder de las marcas!

@CaroFierroVal en Twitter

Nike anunció la semana pasada que cortó los lazos con el futbolista brasilero Neymar el año pasado, porque la superestrella se negó a cooperar con una investigación no concluyente sobre las acusaciones de agresión sexual hechas por uno de los empleados de la compañía.

En Marzo de 2021 David Dobrik, un famoso YouTuber conocido por sus videos de bromas, fue abandonado por múltiples patrocinadores en medio de una creciente reacción después de que una mujer acusara a un miembro de su popular conjunto, de haber sido violada. Las consecuencias para Dobrik, fueron rápidas: Las empresas HelloFresh, General Mills y DoorDas inmediatamente dejaron de trabajar con Dobrik.

Lo mismo pasó el año pasado también con la marca Nike, la cual suspendió el patrocinio del mariscal de campo de los Houston Texans, Deshaun Watson, por denuncias de conducta sexual inapropiada. La suspensión de estos patrocinios marca un precedente en las conductas de las estrellas del deporte, la música o cualquier persona que en el mundo actual puede encontrar la fama, lo cual a su vez modifica tanto los comportamientos de sus consumidores como de quienes sin ser clientes de las marcas admiran y siguen a celebridades.

Los consumidores hoy son más conscientes, más exigentes, más informados, por esto lo que haga o deje de hacer una marca frente a situaciones cuestionables, seguro tiene implicaciones en el comportamiento de sus ventas y en su reputación.

Si NIKE hubiese mantenido su patrocinio a Neymar, o permanece en silencio, indirectamente aprueba todo lo que significa el jugador y por ende sus acciones buenas o reprochables. Por eso hoy una marca puede llegar a modificar el rumbo de comportamientos al enviar mensajes de rechazo o apoyo a celebridades y con esto establece una relación directa con el cliente y esto impacta claramente sus ventas y reputación. Igulamente las celebridades hoy ya saben que están en el ojo del huracán, que sus acciones y pensamientos son mucho más públicos que hace algunos años y que la sociedad para bien o para mal se ha convertido en un juez que aprueba o desaprueba conductas personales. Ojo, las marcas ahora pueden ser parte importante del cambio de las sociedades… ojalá lo sean… para bien