Así vivió Amazonas su primer día de cierre de actividades para mitigar el covid-19

En el departamento de Amazonas las únicas excepciones para poder salir a la calle son para recibir atención médica, para mercar y para servicios esenciales como los bancos, y solo lo puede hacer un integrante de la familia.

Calles completamente solas y un ambiente desolador fue el panorama de este viernes en gran parte de Leticia, capital del departamento, tras la orden del Gobierno Nacional del aislamiento obligatorio, luego de la confirmación de 1.003 casos de covid- 19.

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El cierre de todo el comercio fue en orden, restaurantes y peluquerías también estuvieron todo el día cerrados y así deberán permanecer hasta el 30 de mayo. El toque de queda en todo el departamento es obligatorio para intentar contener la propagación del virus, que estaba incontrolable.

Vale la pena resaltar que la aplicación del cierre de todas las actividades al público sorprendió a algunos sectores, especialmente al de los cultivadores indígenas, que tradicionalmente han vendido sus productos en el sector que es conocido como Puerto Mike, donde nunca habían tenido ninguna restricción.

La Alcaldía y la Gobernación hacen un llamado a los habitantes a cumplir a cabalidad las medidas tomadas por el Gobierno Nacional, y de esta manera reducir la cadena de contagio. Los controles en los puntos fronterizos con Brasil y Perú se mantienen.

El primer caso positivo en el departamento fue confirmado el 17 de abril por el Instituto Nacional de Salud (INS). Se trató de un médico contagiado en Leticia y en menos de un mes Amazonas tiene la tasa más alta de contagio por número de habitantes en el país. Hasta el momento hay más de mil casos confirmados.

Esto quiere decir que 90 de cada 10.000 habitantes del departamento tienen o han tenido covid-19 lo que preocupa a las autoridades por la falta de personal médico e insumos y para brindar una atención oportuna.

En los pasos fronterizos con Brasil, en la línea que separa a Leticia con Tabatinga y Perú, fue reforzada la seguridad para impedir el ingreso ilegal por las 30 trochas que han sido identificadas, y en las que no hay ningún tipo de control.

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En la cárcel de Leticia la situación también es grave.  En las instalaciones diseñadas para albergar 118 reclusos hay un hacinamiento que supera el 51 por ciento.

En el centro carcelario hay 91 reclusos contagiados con covid-19. Los guardias del Inpec piden al Gobierno Nacional facilitar todos los elementos de bioprotección para evitar más contagios.

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