Así estarían operando policías que cobrarían por permitir ingresar drogas a un CAI

La Fiscalía General de la Nación, en una labor articulada con la Policía Judicial Sijín, lograron la captura de seis integrantes de la Policía de Bogotá, quienes estarían implicados en múltiples delitos, pero que fueron investigados principalmente por unos presuntos cobros ilegales a personas detenidas en la estación de Policía de la localidad de Fontibón.

La investigación indica que los uniformados, al parecer, recibían pagos mensuales para permitir el ingreso de elementos prohibidos a las celdas.

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Estos fueron identificados como Julio César Valencia Lennis, Jefferson Gabriel Gaitán Díaz, Daniel Alfonso Puentes Flórez, Carlos Julio Colmenares Luna, Cristian Mauricio Chamorro Candia y Andrés Felipe Ramírez Cepeda.

Venta de drogas y elementos ilegales

El material probatorio recogido en la investigación señala queque los judicializados, al parecer, se habrían concertado con custodios e internos para vender estupefacientes como tucibi, marihuana y bazuco. 

Señalan que también habrían sometido a presiones constantes a los internos con el pretexto de brindarles seguridad y que pudieran acceder a celdas especiales o con comodidades.

Presumiblemente, permitieron el ingreso de alimentos, licor, armas cortopunzantes, celulares y visitas conyugales en horarios no permitidos, así como también, el ingreso de dinero. Por estas acciones ilegales los procesados, al parecer, cobraban coimas que iban desde los 20 mil hasta los 600 mil pesos.

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Los procesados fueron imputados, según sus responsabilidades independientes, por delitos como concierto para delinquir agravado, cohecho propio y concusión.

Caída de banda responsable de cuerpos desmembrados

En horas de la tarde este 12 de septiembre, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, informó que la Policía y la Fiscalía lograron capturar a varios miembros de una banda criminal conocida como 'Los Maracuchos'. 

Se estableció que esta es una de las organizaciones criminales que operan en la capital, y que son responsables de siete de los 23 cuerpos desmembrados y dejados en bolsas plásticas en diversos sectores de la ciudad.