Embajador de Colombia en EE. UU. aclara que continuará monitoreo de cultivos ilícitos con otros métodos

El narcotráfico y los crímenes que se cometen entorno a ello ha sido la lucha constante por parte de muchos gobiernos alrededor del mundo. Es por esta razón que el embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo, se pronunció en su cuenta de Twitter planteando propuestas formales para combatir contra este delito.

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El funcionario pidió, en primer lugar, estrechar las relaciones entre los dos países en torno a la lucha contra el narcotráfico., argumentando que "la estrecha colaboración es fruto de nuestro trabajo bilateral basado en la confianza y el mutuo compromiso. Esta colaboración es vital para el logro de los objetivos compartidos".

Por otra parte, aseguró que la Policía Nacional debería emitir informes constantes sobre las hectáreas sembradas para llevar un monitoreo sobre la producción de estupefacientes. Así mismo, la Cicad de la Oea debería participar en este control con su Mecanismo de Evaluación Multilateral.

Cabe resaltar que la ONU anuncia estos registros anualmente y que la Policía ya almacena datos importantes para ello. Por esta razón, argumentó que es importante combinar los datos para generar documentos mucho más robustos y precisos. 

Así mismo, el embajador indicó que "Colombia y Estados Unidos abordan el impacto negativo del narcotráfico desde un amplio espectro", por lo cual, actualmente, se están evaluando las políticas para que se tomen medidas más efectivas, incluyendo indicadores múltiples y precisos, "enfrentando el daño causado por el consumo y los eslabones del tráfico". 

Murillo resaltó la evolución que ha tenido Colombia en las medidas antinarcotráfico, afirmando que se está evaluando una nueva Política Nacional de Drogas. Por su parte, Estados Unidos estaría modificando sus mecanismos conforme a este proyecto. De esta manera, se obtendrían mejores y mayores herramientas de monitoreo.

¿Cómo abordar esta medida desde el desarrollo?

El embajador indicó que este trabajo debe ser complementario y no se puede enfocar solamente en el monitoreo de hectáreas sembradas de coca: "no puede ser la única medida, ni la principal, de la dimensión del problema de drogas, ni de la eficacia de las medidas adoptadas en el marco de políticas públicas en esa materia".

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Así las cosas, aclaró que es esencial tener medidas que generen un vínculo directo entre el Estado y la ciudadanía, tales como iniciativas de seguridad, desarrollo rural, mejor acceso a la justicia, protección de los ecosistemas, presencia estatal y compensación por servicios ambientales. 

"Más allá de la cooperación bilateral, Colombia y los Estados Unidos aportan su experticia y conocimiento, en el ámbito multilateral, para el efectivo abordaje de esta creciente problemática mundial", agregó Murillo. 

Finalmente, el funcionario hizo un llamado a la comunidad internacional para que se sumen a la propuesta y se puedan apropiar de ello, generando un cambio efectivo en la lucha contra el narcotráfico: "Es hora de enfrentar este flagelo con mecanismos basados en evidencia científica, cuidado de la vida, la seguridad humana y la paz". 

El embajador resaltó su apoyo para fortalecer las políticas antidrogas desde la gestión del presidente Gustavo Petro, en conjunto con el ministerio de Justicia, quienes trabajan para proteger los derechos de la ciudadanía y afrontar los desafíos que exige el combate contra estos crímenes.