Canciller Holguín: No podemos negociar valores, creencias y modelos del país

La ministra de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín, aseguró que el Gobierno venezolano le solicitó cuatro puntos y aclaró que "no podemos por abrir o cerrar frontera negociar los valores, las creencias y los modelos políticos y económicos que el país decida".

La canciller aseguró que la petición del presidente venezolano, Nicolás Maduro, de "controlar a los medios de comunicación" es un tema que no se discute.

"Nos pidieron que haya control a los medios de comunicación. La respuesta de Colombia es que aquí hay libertad de expresión y ese es un tema que no se discute", aseguró Holguín en una rueda de prensa, a propósito del encuentro del 26 de agosto con su homóloga venezolana, Delcy Rodríguez, sobre el tema.

En esa reunión para resolver la crisis que ya deja unos 11.000 afectados, entre deportados y quienes retornaron por temor, Rodríguez hizo otras peticiones del gobierno de Nicolás Maduro, según Holguín, aunque negó que quedaran por escrito.

La jefa de la diplomacia venezolana habló entonces de la presencia de "paramilitares de derecha en la frontera" -argumento que Caracas empleó para cerrar varios puntos limítrofes-, ante lo cual Holguín replicó que Colombia lucha contra las "bandas criminales dedicadas al narcotráfico y al contrabando".

La canciller Holguín insistió en que "se necesita que los dos países se comprometan a hacerlo", y añadió que pese a acuerdos de cooperación, las autoridades venezolanas "cancelaron o aplazaron 15 reuniones" al respecto, desde hace un año.

Holguín indicó además que la diferencia de precios en productos y combustibles subsidiados en Venezuela respecto a los de venta libre en Colombia, "hacen muy difícil controlar el contrabando".

"Nos piden que deroguemos nuestro régimen cambiario. Nosotros tenemos libertad, ellos controlan el régimen de cambios", indicó Holguín, rechazando de tajo esa posibilidad.

La canciller le pidió al Gobierno de Venezuela que los deportados puedan recuperar sus pertenencias y cumplir con protocolos mínimos de deportación.

La crisis en la frontera comenzó el 19 de agosto con el cierre indefinido de la frontera decretado por Maduro en el estado Táchira, limítrofe con el departamento del Norte de Santander.

En su momento, el mandatario lo atribuyó a "paramilitares colombianos" y ordenó igualmente el estado de excepción en varios municipios limítrofes.

La tensión aumentó hace una semana, cuando ambos países llamaron a consultas a sus embajadores.