Vacunarse salva vidas

@Fedeseguridad1

En Colombia ya tenemos múltiples opciones de vacunas para protegernos de este grave virus del Covid-19. Sin ser un experto hoy ya sabemos que una vacuna le enseña a nuestro cuerpo a cómo combatir un virus disminuyendo el riesgo de contagio y reduciendo drásticamente los riesgos de complicación y muerte.

Una de las cosas más importantes de la vacuna, es que con ella además podemos lograr la inmunidad del rebaño, es decir, que lleguemos a un alto nivel de personas vacunadas, lo que reduce considerablemente el contagio.

En Bogotá, por ejemplo, hace 3 meses la Alcaldía confirmó que la mortalidad en mayores de 70 años contagiados de Covid-19, se había reducido en un 50%.

De acuerdo con datos de diferentes medios de comunicación internacionales, Israel fue uno de los países más rápidos en vacunar a toda su población, y hace 5 meses confirmó que las tasas de muerte de contagiados de coronavirus cayeron en un 98%.

Eso es lo que ofrece la vacuna. No es la cura, ni desaparece el virus, pero es el mecanismo más efectivo y seguro actualmente para reducir la peligrosidad del virus y permitirnos retomar la vida social y nuestra libertad. La ciencia y años de desarrollo han llegado a un nivel de avance que permitió responder con rapidez a esta emergencia.

Sin embargo, aunque los científicos llevan décadas de descubrimientos y avances que permitieron crear estas vacunas en tiempo récord, lastimosamente la desconfianza y la desinformación han ganado terreno. Estamos tan habituados a la tecnología que ya no nos maravillamos con inventos y nuevos descubrimientos, las novedades se volvieron cotidianas, parte del paisaje.

Esto, sumado a teorías conspirativas de ciertos grupos políticos, ha permitido sembrar desconfianza en las personas, y esto lastimosamente, se difunde sin filtros a través de las redes sociales, lo que ha generado desconocimiento y confusión alrededor de las vacunas.

Como resultado de estas teorías, muchas personas se niegan a vacunarse, lo cual es un problema para todos porque esa persona que no se vacuna puede salir a la calle, contagiarse y contagiar no solo a su familia, sino también a más personas con las que tenga contacto. Es un círculo interminable que, hasta hoy, solo podemos frenar con la vacuna, esa es nuestra mejor arma contra el virus.

Tener una vacuna segura y confiable en una pandemia, es un lujo que lastimosamente muchos están desperdiciando. Es como estar en un barco hundiéndose, a punto de ahogarse y rechazar un chaleco salvavidas porque mi vecino dijo que le dijeron que ese chaleco era poco confiable, pero mi otro vecino se puso el mismo chaleco, está flotando y salió del barco sano y salvo.

Miles de personas han rechazado la vacuna, que es nuestro chaleco salvavidas en medio de este naufragio, por teorías sin comprobar, muchas de ellas absurdas o que son pura ciencia ficción.

Hasta el momento, lo único claro que ha dejado este virus es que el autocuidado y la vacunación son las únicas formas que tenemos de detenerlo. Sí, puede que nos contagiemos estando vacunados, pero es mucho más probable que los síntomas sean leves y que nos recuperemos en casa sin mayores complicaciones.

Por eso los invitamos a no “comer entero” de cualquier mensaje de redes sociales y a ponerse el chaleco salvavidas para salir a flote de este barco hundiéndose llamado Covid-19 porque VACUNARSE SALVA VIDAS.

Yo ya me vacuné ¿y usted?