El dolor de una familia que perdió a dos hijos tras la tragedia de la ruta 12 del Agustiniano
La familia Reyes Beltrán vivió por partida doble el dolor tras el trágico accidente de la ruta del colegio Agustiniano Norte en 2004.
Noticias RCN
08:43 p. m.
Hace 20 años, una imagen conmovió al país. Era el llanto inconsolable de los padres que aún no creían que habían perdido a sus hijos en el accidente de la ruta 12 del Agustiniano Norte.
Comenzaba otra forma de ver la vida y a necesidad de sanar esa inmensa tristeza que deja el vacío. A muchos de ellos ni siquiera les dejaron ver los cuerpos de sus pequeños, debido al estado en el que se encontraban.
Para los esposos Reyes Beltrán el dolor se hacía presente por partida doble. Sus hijos Juan Sebastián y Andrés Felipe hicieron parte de las 21 víctimas del fatal accidente.
Algo que nunca pensaron que les fuera a pasar, pero que decidieron poner en la voluntad de Dios para aceptar la partida de los pequeños.
El recuerdo de los dos ángeles que la muerte les arrebató
Como muchas parejas enamoradas, los trajeron al mundo para sellar el amor que se profesaban y conformar el hogar que tanto añoraban. En ese momento, ambos estaban estudiando en la universidad.
Aunque querían verlos crecer, disfrutar sus triunfos y acompañarlos en sus frustraciones, la vida les tenía preparado algo diferente.
Esperanza Beltrán, la madre de los pequeños, recuerda con amor los días de juegos, risas y las olimpiadas en las que participaban en el colegio.
Pero el tiempo, la unión, la compañía de sus familiares y el abrazo eterno de sus dos ángeles, les han dado la fortaleza para reparar el dolor que cambió su vida ese 28 de abril del 2004. El lamentable hecho hizo inquebrantable la relación de estos esposos, que poco a poco han logrado superar la ausencia.
Un nuevo comienzo para la familia
Al final, resolvieron seguir estudiando y trabajando, y cuando estaban terminando sus carreras, el cielo los bendijo con dos nuevos integrantes.
Para ellos, volver a formar una familia fue un regalo divino. Ahora les queda la satisfacción del grado póstumo de Andrés Felipe y Juan Sebastián, quienes junto a los 19 ángeles más, son considerados héroes por la comunidad del Agustiniano.
Todos los padres que pasaron por este drama tienen una causa en común, y es lograr sanar el dolor que les dejó la pérdida de sus pequeños.