Pelé: ¿en realidad hizo más de 1.000 goles?

Fueron más de mil goles, para ser exactos 1.283, esas son las cuentas que reposan en el entorno de Pelé y el fútbol brasileño, sin embargo, para la FIFA son menos, pero eso hoy poco importa pues su magia no se redujo a un número o a una cifra, su talento fue más enorme que cualquier cantidad de goles.

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Pelé marcó más de mil goles en 1.367 partidos

El misterio mejor guardado de la historia del fútbol vincula al ‘Rey’ con la cantidad de goles marcados en su carrera deportiva, según él, fueron 1.283 goles en 1.367 partidos, difícil para los amantes de la estadística hacer un conteo único sobre las hazañas de la ‘‘Perla Negra’’, sin redes sociales ni sistemas tecnológicos avanzados, el lápiz y el papel plasmaron los números del 10. 

Una ardua investigación demuestra que 767 los marcó en partidos oficiales y 527 hacen parte de encuentros amistosos,entrenamientos y exhibiciones.La FIFA ubica al ‘‘Rey’’ como el tercer máximo goleador de la historia, solo por detrás de Cristiano Ronaldo con 819 y el austriaco y checoslovaco Josef Bican con 805.

Muchos de los goles que anotó Pelé se dieron con equipos que tal vez usted no tenia conocimiento, dieciocho anotaciones con el Ejército de Brasil, nueve en un seleccionado provincial de Sao Pablo, seis en un combinado entre Santos yVasco da Gama, cinco goles en partidos benéficos y tres para el sindicato de atletas de Sao pablo.

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Aunque sus tiempos no permitieron guardar todo el material audiovisual con su calidad, la corona del mejor de todos los tiempos reposará en su cabeza, puede que el numero sea inexacto, sin embargo, lo poco que podemos ver es suficiente para respaldar su legado, el hombre de tres corazones que cambió el deporte en su amada Brasil. 

Las jugadas que convirtieron al genio Pelé en un mito

En 1958, en la final del Mundial ante Suecia, el delantero brasileño se elevó para controlar el balón con el pecho, tiró un sombrero para superar a un defensa y remató de volea al interior del arco sueco. 

En 1959, ‘O Rei' aseguró que el gol más bonito lo anotó con el Santos, contra el rival paulista de Juventus, quien recibe un centro desde la derecha, deja atrás a un primer defensa con un túnel, con el control orientado y luego realiza tres sombreros consecutivos.

En 1970 se especializó en el “uno-dos” con el adversario contra Uruguay, en semifinales del Mundial de México. En el mismo año, Pelé pareció desafiar las leyes de la gravedad para inmortalizarse en el aire y catapultar el balón a las redes. Nunca antes, una manifestación física de un atleta había tenido tanta trascendencia y fue entonces cuando, en su apogeo, Pelé se convirtió en leyenda, con el mundo a sus pies.

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