Deportistas en política: el fracaso de los congresistas

@CaroFierroVal en Twitter*

La maravillosa atleta y mujer Caterine Ibargüen afirma que quiere saltar a la política porque hay niños que debemos arrebatarle a la delincuencia, a la prostitución y a la drogadicción. 

Dice la deportista que quiere llegar al Congreso para gestionar leyes que les den la posibilidad a estas personas de realizar sus sueños. Una de las mejores atletas de todos los tiempos tiene todo el derecho de lanzar su candidatura e incursionar en la política y llegar a trabajar por las condiciones de los demás deportistas, pues nadie más que ella sabe que no son las mejores. 

Y esas por las que ella luchará, son circunstancias que, a estas alturas de la vida, no tendrían que ser representadas por una atleta de alto rendimiento ganadora de medallas olímpicas y dueña de records mundiales, sino por algunos de los 268 congresistas que han pasado por el Capitolio por lo menos en los últimos 21 años de este siglo. 

Tenemos el Ministerio del Deporte creado hace cuatro años, existe una institucionalidad y una democracia estable la cual debió responder a las condiciones básicas de algo tan importante para una sociedad como el deporte.

Tenemos algunos Senadores y Representantes que ya llevan más de 10 años en el Capitolio. Pero los Honorables Congresistas, con contadas excepciones, no están a la altura del momento histórico del país y su desempeño es realmente pobre y deja mucho que desear. 

Las próximas elecciones son cruciales y decisivas para que quienes realmente entienden y conocen la labor real de un congresita se reeligan y lleguen a su vez nuevas figuras con propuestas claras, con verdadera vocación de representación, con conocimiento del funcionamiento del órgano legistalitivo y de la política del bien común. 

Bienvenida Caterine Ibargüen a luchar por sus ideales, pero si ella hubiera elegido seguir en su escenario natural como deportista, quienes llevan años preparándose en la política o han sido congresistas por varios periodos, debieron darle todas las condiciones para que ella y muchos otros puedan alcanzar su pasión y seguir viviendo en ella. 

*Politóloga