2022: la oportunidad de los ‘alternativos’ | Por: Fernando Posada
Ante los ojos del público colombiano, el gobierno de Duque no ha cumplido con las expectativas y el panorama para las elecciones de 2022 sin duda cambiará.
06:00 a. m.
Por: Fernando Posada
@fernandoposada_ en Twitter
El fin de semana, el excandidato presidencial Sergio Fajardo dijo en entrevista con el periódico El Tiempo que el uribismo no ganará la presidencia en 2022. Y la tesis de Fajardo, a pesar de haber causado inmenso revuelo en el mundo político, tiene sentido: al gobierno Duque no le ha ido bien ante la percepción ciudadana, y esto lo reflejan con claridad las encuestas.
Esto es especialmente significativo teniendo en cuenta que en el sector político del gobierno, el apoyo popular, o como lo llaman, el apoyo del ‘constituyente primario’, es entendido como un indicador directo de legitimidad. No tener a las encuestas de su lado es especialmente grave para un partido político que ha dado tanta importancia a las mediciones de popularidad en su forma de entender la democracia.
Ante los ojos del público colombiano, el gobierno de Duque no ha cumplido con las expectativas. Y el panorama para las elecciones de 2022 sin duda cambiará bastante: en 2018, el uribismo había logrado unificar un descontento con el rumbo del acuerdo de paz y capitalizar políticamente los resultados del plebiscito de 2016. Esto fue fundamental para su triunfo electoral.
Así las cosas, el partido de gobierno llegaría a las urnas en 2022 sin un apoyo similar al que recibió en las elecciones pasadas y el descontento con el gobierno nacional podría pasar cuenta de cobro en términos de votación. Al mismo tiempo, sectores de centro izquierda –que siguen divididos– han logrado ser vistos como alternativa de poder en una próxima contienda electoral.
Por eso tiene razón Fajardo al decir que el uribismo no pone presidente en 2022. Y las condiciones están dadas para que un candidato de centro-izquierda pueda ganar por primera vez en la historia moderna del país, teniendo en cuenta que el elector más importante de las recientes elecciones enfrenta una caída en materia de popularidad. El gran reto será el mismo de siempre, en el que los ‘alternativos’ tantas veces han tropezado y perdido cualquier oportunidad de poder. El desafío será que los sectores de centro-izquierda logren escoger un candidato único, en medio de una monumental y permanente pelea de egos.
La pregunta que queda, y que aún es muy temprano para responder, es ¿quién podrá ser esa figura de centro izquierda capaz de unir a todos los ‘alternativos’, sumar más votos de los que resta y llegar a segunda vuelta con opciones reales de ganar? Esa, por ahora, debe ser la pregunta que todos los alternativos se tienen que plantear.
*Politólogo y columnista de opinión.