Una de las grandes enseñanzas de la profesora Margaret Mead | Por: María Alejandra González
Para ella era muy importante la civilización. Explica que la civilización comienza en el momento en que nosotros tenemos evidencia que estamos ayudando a otros.
05:59 a. m.
Por: María Alejandra González*
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La cortesía, la modestia, los buenos modales y la conformidad con las normas son considerados parámetros universales de la ética. Sin embargo, fue una mujer --quien murió en 1978-- la doctora en antropología de la Universidad de Columbia, Margaret Mead, quien en sus estudios en el pacífico especialmente en la isla de Samoa, encontró que la cortesía, la conformidad con las normas, los buenos modales no significan lo mismo para las diferentes culturas.
La doctora Margaret Mead fue una activista muy visible en los medios de comunicación masivos en los años 60 y en los años 70, activista en los temas de revolución sexual, activista en los temas del entendimiento, de las diferencias entre las culturas y muy activa en el entendimiento de lo que significan las civilizaciones y lo que significa ser humano, y esas sensibilidades y esas libertades.
Margaret Mead, en su vida personal, fue la hija de una familia de padre y madre académicos, estudiosos, investigadores, pero al mismo tiempo estuvo casada tres veces, tuvo tres divorcios.
Una anécdota que es muy conocida de la profesora Mead sobre la civilización: para ella era muy importante el tema de la civilización y explica que la civilización comienza en el momento en que nosotros tenemos evidencia que estamos ayudando a otros.
Una vez un estudiante le pregunta a la profesora Mead qué significa o cuáles son esas primeras señales que nosotros tenemos de civilización. Y ella cuenta: tenemos evidencia de unos restos arqueológicos de 15.000 años en donde hay un fémur que está curado. Y al encontrar un fémur curado significa que hubo alguien que tuvo una fractura y que hubo alguien más que lo cuidó.
Para una reparación de un fémur se necesitan, sin los adelantos científicos que tenemos de la medicina actual, por lo menos seis semanas de cuidado y de quietud. Eso significa que por lo menos una persona expuso su vida para estar al cuidado de otra persona. Lo cuidó, lo movió en un lugar y estuvo cuidando de él o de ella todo el tiempo.
Explica eso que es la gran diferencia --y eso no fueron los primeros artefactos, o las primeras herramientas, o las primeras construcciones que nos dan señales de la civilización-- fue ese momento en donde nosotros empezamos a tener esa diferencia entre los animales. Cuando en el mundo animal, un animal se hiere o tiene una fractura, el animal normalmente muere en la naturaleza porque no tiene quien lo cuide y porque otro animal lo puede atacar y puede tomar ventaja de su vulnerabilidad.
Esto es una diferencia muy grande en el mundo y en la civilización humana. Una de las grandes enseñanzas de la profesora Margaret Mead, a quien quiero rendirle un homenaje el día de hoy.
*Profesora de la Universidad EAFIT, PhD en Negocios Internacionales y Responsabilidad Social Empresarial.