Sindicatos clandestinos en Bogotá operan como discotecas con drogas, menores y violencia sin control
Más de 200 sindicatos registrados encubren fiestas ilegales con venta de licor adulterado, consumo de estupefacientes y riñas violentas en la capital.
Noticias RCN
08:34 p. m.
Una investigación reveló que decenas de establecimientos clandestinos en Bogotá utilizan la figura legal de sindicatos para operar como discotecas sin supervisión, donde se registran consumo de drogas, venta de licor a menores de edad, riñas violentas y hasta muertes relacionadas con el estrés por contaminación auditiva.
Sindicatos clandestinos en Bogotá
Según la Personería de Bogotá, más de 200 sindicatos están registrados en la capital, pero las autoridades advierten que varios operan como fachada para eventos privados que evaden las restricciones horarias de rumba establecidas por el Distrito.
En julio, la administración capitalina limitó las fiestas hasta las 3 de la mañana, definiendo 19 zonas que podrían extenderse hasta las 5:00 a.m., pero muchos establecimientos nunca detuvieron sus operaciones.
El coronel Rodríguez, quien ha liderado 26 operativos este año en Antonio Nariño, explicó: "Realizan una actividad comercial con ánimo de lucro y eso está fuera de la norma. Eso es una fachada". Durante las intervenciones policiales se han encontrado menores de edad, drogas de todo tipo, licor adulterado y armas cortopunzantes.
"La mayor causa en la cual hemos cerrado estos establecimientos han sido los menores de edad", indicó Giovanni Cristancho, comandante de Policía de Bogotá.
Pablo y Rafael, propietarios de uno de estos lugares, justificaron su decisión:
"Empezamos como actividad económica, pero a raíz de los problemas que hemos tenido, de que el horario, la presión del coronel, entonces adoptamos por montar un sindicato", explicó Rafael Felipe Guerrero.
Su sindicato clandestino VIP agremia cerca de 500 supuestos trabajadores de bares y discotecas, permitiéndoles operar 24/7 con eventos que reúnen hasta 300 personas cada fin de semana.
Según la Organización Internacional del Trabajo, un sindicato es una agrupación laboral orientada a la defensa de derechos, pudiendo realizar ocasionalmente jornadas de esparcimiento. Sin embargo, las autoridades señalan que esta figura está siendo desvirtuada.
"Se han intervenido 12 de estos lugares con suspensión temporal de la actividad, demostrándose que han habido menores de edad, que hemos capturado personas por venta de estupefacientes", agregó el coronel Rodríguez.
¿Qué se encuentra en este tipo de establecimientos?
Los operativos revelan situaciones graves. En agosto, en el barrio El Triunfo de Kennedy, una riña dejó rastros de sangre; en junio se encontraron 30 menores en Kennedy y Bosa; tres adolescentes de 16 años fueron hallados alcoholizados junto a drogas sintéticas como Tussi, que según la Universidad Nacional puede provocar taquicardia, convulsiones y muerte. Circulan cartas físicas y virtuales que ofrecen 11 tipos de drogas en estos establecimientos.
Las consecuencias trascienden la violencia interna. Una enfermera relató cómo el ruido constante afectó fatalmente a su esposo:
"Desgraciadamente, mi esposo ya lleva cinco meses fallecido por su estrés. Me decía, no, yo no puedo, amor, yo no puedo", relató una residente de la zona.
La situación evidencia un vacío normativo crítico. Desde octubre, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, prometió una directriz que autorizaría a cada entidad intervenir, pero las autoridades aún esperan ese documento.
"Hemos desarrollado más de 250 operativos. De esos, 78 han derivado en cierres parciales. Nunca hemos podido llegar a cierres totales", explicó Cesar Restrepo, secretario de seguridad de Bogotá.
Kennedy, con más de 1.200.000 habitantes y reconocida zona de rumba, concentra buena parte de la problemática donde hay alcohol, hay drogas y hay armas, según las autoridades policiales.

