Noemí Sanín renuncia a la Comisión de Relaciones Exteriores

"Hemos conocido la decisión del gobierno colombiano, por lo demás absolutamente legítima, corroborada personalmente por usted, en el sentido de que el Gobierno, debidamente asesorado nacional e internacionalmente, no comparte nuestras opiniones en lo que se refiere a las preguntas que hemos venido haciéndonos", señala Sanín en su comunicación.

La teoría de la excanciller Sanín, elaborada junto al académico e investigador Miguel Cebalos, sostiene que la juez china de la CIJ Xue Hanquin debió poner en conocimiento del Presidente de la Corte un posible conflicto de intereses que ella tendría, debido a la intención de China de construir un canal interoceánico en Nicaragua, país con el que Colombia tenía una disputa territorial en el Caribe.

De acuerdo con la información conocida, había un acuerdo para la firma de un convenio entre Nicaragua y la empresa china 'HK Nicaragua Canal Investment Company' para la construcción de dicho canal interoceánico.

"¿Los acuerdos de Nicaragua y la mencionada empresa China, podrían haber comprometido aguas, a nuestro juicio, pertenecientes a la zona económica exclusiva de Colombia, para ese momento en discusión en razón al fallo pendientes de la CIJ?", se pregunta la excanciller Sanín en su comunicación al Jefe del Estado.

Sanín se ratificó en que "el fallo proferido por la CIJ es antijurídico, entre otras razones porque desconoció y violó la intangibilidad del tratado vigente “Esguerra-Bárcenas” celebrado entre las partes a perpetuidad".

De inmediato, añade: "(El fallo) desconoció la historia, hizo caso omiso a los derechos de los raizales, destruyó la arquitectura del archipiélago, enclavó y aisló parte de él, desconoció de tajo tratados de fronteras con terceros países (y) convenios ambientales que protegían el medio ambiente".

Anotadas estas consideraciones, Noemí Sanín le dice en su carta al presidente Santos que se separa de la Comisión de Relaciones Exteriores –a la que estuvo vinculada durante tres gobiernos- para evitar situaciones "incómodas" o de confrontación con la posición que ya asumió el Gobierno.

"Mi presencia (…) puede prestarse a que se confunda nuestra posición, con la del gobierno y adicionalmente por tener opiniones tan disímiles en esta materia, podría colocarlo a Usted señor Presidente, y a mí, en situación incómoda", precisa.