Sara Alarcón, la artista colombiana que ahora impulsa a otros a pintar su propio camino

Desde muy pequeña, Sara Alarcón supo que lo suyo era pintar. Con una libreta en mano y el alma inquieta, encontró en el arte su forma de vivir y de contar historias. Su niñez estuvo marcada por cuadernos llenos de dibujos, tareas escolares hechas para sus amigas y tardes enteras creando junto a su mamá, quien no solo le compraba los materiales, sino que fue su mayor creyente: su mami-manager.

Aunque estudió diseño y trabajó en el mundo corporativo, el arte siempre estuvo ahí, acompañándola en reuniones, en conversaciones, en los márgenes de sus cuadernos. “Saris, a ti lo que te gusta es pintar”, le decía su jefe de entonces. Fue ese impulso el que la llevó a renunciar y apostarlo todo por su vocación.

Su salto de fe la llevó a Inglaterra, donde creó una obra inspirada en Oxford y fue seleccionada para exhibirla durante el Jubileo de la Reina. Fue la única colombiana en participar y esa experiencia marcó el inicio de un camino sin retorno. “Esto me ratificó que si estoy en este camino es por algo”, cuenta.

Así nació Brocha

Pero abrirse paso como artista emergente en Colombia no es fácil. Las galerías exigen trayectoria, cobran por exhibir y muchas veces no ofrecen una vitrina real para los nuevos talentos. Ese panorama lleno de puertas cerradas y recursos limitados le inspiró a crear una solución: Brocha.

Junto a su equipo, Sara lanza esta nueva plataforma digital que conecta artistas reconocidos con nuevos talentos de Latinoamérica. “No queremos ser enemigos de las galerías ni de los museos, queremos trabajar juntos para que el arte crezca y tenga más visibilidad”, explica.

Brocha estará disponible desde finales de agosto en www.brocha.ar y busca convertirse en una red de colaboración, mentoría y proyección internacional para quienes sueñan con vivir del arte.

Hoy, Sara ha expuesto en Oxford, Connecticut, Bogotá y próximamente en Florencia. Su obra lleva el color de Latinoamérica, la libertad del arte empírico y la fuerza de una creadora que no se rinde. “La curiosidad es la clave para la creatividad”, dice con firmeza.

Porque cuando el arte nace del alma, no hay frontera que lo detenga.