¿Cómo será la recuperación económica de Colombia y la región en medio de la pandemia?

Con la reapertura económica de casi todas las cadenas productivas se asoma el inicio de dos fases que permitirán el despertar de la economía en nuestro país: estabilización y recuperación, unas ecuaciones complejas de resolver en estos tiempos.

Para el presidente de Colombia, Iván Duque, uno de los pulsos más difíciles de sortear ha sido encontrar el equilibrio entre salvaguardar y preservar la vida o continuar con la dinámica normal de la economía. El costo de la prolongación del confinamiento podría traer consecuencias sociales y económicas que dejarán cicatrices muy marcadas.

A pesar de los grandes esfuerzos del Gobierno Nacional por garantizar paquetes de ayuda oportunos y tomar medidas a tiempo, no han sido del todo suficientes. Los herederos del coronavirus no son solo los contagiados, también lo son medianos y pequeños empresarios quienes han visto desmoronar el esfuerzo logrado en décadas de trabajo. Hoy piden financiación y alivios para seguir en pie y no perderlo todo.

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Además, está el trabajador al que mandaron a vacaciones sin saber su situación real o las familias que echaron mano de sus ahorros y hoy se quedaron sin recursos, y el sector informal que pide ayuda y comida porque la nutrición de sus hijos depende de la alimentación escolar.

“Si se empieza a reactivar la economía en junio julio y agosto, hacia el año completo vamos a tener una caída del PIB entre el 8 y 10%. Eso es calamitoso y requiere de una acción muy decidida del Estado que hasta ahora no ha ocurrido. Ha sido muy tímido en utilizar las herramientas de las que dispone”, aseguró Salomón Kalmanovitz, economista y profesor. 

Para el Banco Mundial, organismo multinacional que brinda asistencia financiera a los países en desarrollo, el panorama para la región es optimista.

“Nosotros esperamos un año difícil en el 2020 para la región, pero también somos optimistas que esta va a ser una crisis en ‘v’, es decir, con una caída profunda, rápida, pero también con la recuperación relativamente rápida”, dijo Martín Rama, jefe del Banco Mundial América Latina y el Caribe.

Según datos de la Organización internacional del Trabajo (OIT), en los próximos tres meses podrían perderse 195 millones de empleos en el mundo y llevar a 60 millones de personas a la pobreza extrema. Mientras tanto, en Colombia según las cifras del Dane, el desempleo llegó al 19.8%. 

“Muchos de los trabajadores de América Latina son informales, viven día a día. El haber estado sin poder salir, sin poder trabajar durante semanas y meses es muy duro para ello. El problema que tenemos ahí, a diferencia de las economías avanzadas, es que no tenemos recursos ilimitados, o sea, que hay que ser selectivos y claros en cómo se hace (…) el espacio fiscal de los distintos países para ayudar se vuelve muy importante, Colombia por suerte es de los países que está en una posición más firme”, afirmó Rama.   

Es por esto que urge el diseño de una jerarquía de propuestas sociales que permitan arrebatarle las víctimas a la pobreza creando paquetes de estímulo que proporcionen salidas  fiscales e inclusión financiera que brinden la subsistencia y recuperación de la economía luego de haber estado paralizada por más de dos meses.