Ayotzinapa: se cumplen siete años de la desaparición de los 43 estudiantes en Iguala, México

Este domingo 26 de septiembre se llevó a cabo una marcha en la Ciudad de México en conmemoración de los siete años de la desaparición de los 43 estudiantes normalistas en la ciudad de Iguala, capital del estado de Guerrero, México.

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"¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!" Fue la que consigna que lanzaron los manifestantes, entre quienes se hallaban los padres, madres y compañeros de los estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, que desaparecieron la noche del 26 de septiembre de 2014.

El punto de encuentro para la salida de los marchantes fue en el Ángel de la Independencia y, tras celebrar una misa, salieron hasta la Plaza de la Constitución, lugar al que llegaron tres horas después de iniciado el recorrido. 

Hasta el momento, tan solo tres jóvenes de los 43 han sido identificados por las autoridades, quienes durante toda la investigación han sido cuestionadas en su accionar debido a la liberación de presuntos responsables.

Pese a esto los progenitores de los menores continúan exigiendo al gobierno mexicano respuestas y celeridad en el marco de la investigación, uno de los compromisos asumidos por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.

Las dos versiones de los hechos

En la primera versión, entregada durante el mandato del presidente Enrique Peña Nieto, y conocida como “verdad histórica”, los jóvenes se dirigían para la Ciudad de México, en donde iban a participar de una marcha en conmemoración a la Matanza del 2 de octubre.

Esa noche de septiembre del año 2014, los estudiantes, fueron detenidos por policías municipales corruptos en Iguala y entregados a miembros de la organización criminal Guerrero Unidos, quienes los asesinaron, incineraron sus restos en un vertedero de basura de Colula y luego tiraron los restos en el río San Juan.

En esta versión el móvil de la muerte de los estudiantes habría sido que los confundieron con miembros de un cartel rival.

Varios de estos policías que habían sido capturados en el marco de la investigación resultaron libres en el año 2019. Hasta su último día de gobierno, Peña Nieto defendió dicha versión.

Con la llegada de Andrés Manuel López Obrador, en el año 2018, el caso se volvió a abrir y dio un giro que desmintió la versión entregada por su predecesor.

Para ello se creó de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa, formada por el Gobierno, las familias y organizaciones de derechos humanos, quienes dieron voz a las familias afectadas, las cuales, en indagaciones pasadas, no fueron tenidas en cuenta por las autoridades, cuestionadas duramente en ese momento por sus decisiones.

Sin embargo, la segunda versión, basada en una investigación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sobre el caso, señaló que los cuerpos de los 43 no pudieron ser quemados en ese lugar.

“No existe ninguna evidencia que apoye la hipótesis” aseguró la GIEI tras una indagatoria de seis meses en la que argumentó que el fuego que se hubiese generado en el vertedero habría generado una columna de humo de 300 metros, la cual no pudo haber pasado desapercibida para los habitantes de alrededor.

Los tres cuerpos identificados

El Gobierno de López Obrador derrumbó la versión de Peña Nieto, al identificar en julio del 2020 los restos de Christian Alfonso Rodríguez en la barranca de la Carnicería, lejos del basurero donde ocurrieron los hechos de acuerdo con Peña Nieto.

De igual forma, en junio de 2021, las autoridades mexicanas identificaron los restos de Jhosivani Guerrero en el mismo lugar que hallaron las de Rodríguez, la barranca de la Carnicería.

Por su parte, en diciembre de 2014 fue identificado Alexander Mora, cuyos restos fueron descubiertos en el río San Juan, junto al basurero de Colula.

Las pesquisas continúan

El 26 de septiembre de 2020, al cumplirse seis años de la tragedia, el presidente López Obrador pidió disculpas a las familias en nombre del Estado mexicano y anunció órdenes de arresto contra militares quienes, según Peña Nieto, no estaban vinculados con los hechos.

De igual forma el gobierno espera obtener la versión de los responsables de la investigación de la anterior administración, que estuvo al mando de Tomás Zerón, actualmente prófugo en Israel.

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Hasta el momento los padres claman justicia por parte de las autoridades y piden que se esclarezca lo ocurrido con sus hijos.