La realidad de Chipre, un país controlado y dividido entre más países

Chipre es una isla en el Mar Mediterráneo en Europa, y es un país que tiene una historia muy diferente a los demás. Actualmente hace parte de la Unión Europea, sin embargo, una buena parte de su territorio no es controlada por el Estado Chipriota.

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Casi un tercio del territorio de la isla es controlado por un gobierno que se formó en 1974 tras una invasión de Turquía a la isla, conformado la República Turca del Norte de Chipre, un territorio que solo ese país reconoce a nivel mundial. 

El control de la isla ha fluctuado a lo largo de los años. Durante la Segunda Guerra Mundial y los años post guerra, la posición estratégica de esta isla por su cercanía al Canal del Suez, hicieron que tuviera un atractivo particular. La invasión turca en los años 70 desplazó a miles de familias del territorio. 

Muchas de estas familias desplazadas son de raíces griegas, ya que Grecia se encuentra cercano a la isla, y se vieron forzadas a abandonar este territorio. 

El gentilicio de Chipre tiene raíces turcas y griegas. 

La isla tiene un lado greco-chipriota y el lado turco-chipriota, el cual es un territorio de menor tamaño pero se considera un Estado propio.

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Como si se tratara de una versión actual del Muro de Berlín, a lo largo de todo el país hay una franja que lo divide, una zona de distensión que no pertenece a ningún país, y es controlado por las Naciones Unidas, marcando fronteras entre los territorios. Además, por si faltara otro actor dentro del territorio, los británicos también controlan unas zonas donde se ubican bases militares.