León XIV: las posturas que seguiría la iglesia durante su pontificado
Durante su vida pastoral, Robert Prevost ha sido claro y contundente con sus posturas sociales y políticas. Su paso por América Latina, sin duda, marcó gran parte de sus ideas.
Noticias RCN
09:10 p. m.
Quienes conocen al nuevo papa, León XIV, hacen referencia a su vocación y cercanía con los fieles. Un carisma que puede ser comparado con el de Francisco, pues sabe lo que es la pobreza, el hambre y los padecimientos.
Las causas sociales, la política y el papel de la iglesia en el mundo, son algunas de las preocupaciones que Robert Prevost ha expresado a lo largo de su trayectoria religiosa. En sus plegarias siempre ha estado presente la paz mundial y la resolución de conflictos en el sur global.
Desde siempre, ha destacado la responsabilidad de la iglesia con los católicos y el mundo.
Tratando de ver cómo podemos ser una iglesia que verdaderamente refleja lo que Jesucristo ha querido para su pueblo.
La polarización y las redes sociales
La polarización es una problemática que desde hace años ha combatido. Su posición al respecto ha sido clara: se necesita diálogo y paz.
En una entrevista con Vatican news se refirió al rol de las redes sociales en la actualidad:
“A veces se corre el riesgo de alimentar divisiones y polémicas. Hay una gran responsabilidad en el uso correcto de las redes sociales, la comunicación, porque es una oportunidad, pero también un riesgo”, puntualizó.
Muchas de sus posturas están alineadas con las de su predecesor, Francisco, como la defensa del medioambiente y su preocupación por la criminalización de los migrantes en el mundo.
Las tareas de Francisco que deberá terminar León XIV
Prevost llega a suceder a un papa considerado disruptivo y reformista como Francisco, quien además, dejó tareas pendientes a su sucesor.
El primer papa latinoamericano, primer jesuita y primero en elegir el nombre de Francisco, tuvo desde siempre un compromiso con los pobres, los desfavorecidos y los olvidados.
Su sencillez rompió esquemas. A los 76 años fue elegido como papa y estuvo 12 años al frente de la iglesia católica. Desde el primer día, rechazó la suntuosidad del cargo, poniendo la austeridad por encima de cualquier cosa.
Sus encíclicas marcaron una era. Ratifico su compromiso con temas como el medioambiente, el valor de la fe en el mundo moderno, la fraternidad universal en un mundo opacado por el conflicto y la perspectiva sobre el amor.
Dentro de la iglesia, promovió una profunda reforma sobre la Curia Romana, las normas sobre los abusos al interior de la iglesia y la postura sobre el papel de las mujeres al interior de la institución.