Sanos y salvos, rescatan a familia amenazada con escopeta por el padre en Valle del Cauca
Una llamada alertó a las autoridades sobre un vigilante quien, con una escopeta, retenía contra su voluntad a su esposa y cuatro hijos dentro de una vivienda.
Noticias RCN
01:57 p. m.
Un operativo conjunto por tierra y aire permitió preservar la vida una madre y sus hijos menores, quienes eran intimidados con un arma de fuego por el jefe del hogar. El hombre los mantenía retenidos dentro de una vivienda en zona rural de Candelaria, Valle del Cauca.
Fue una llamada la que alertó a las autoridades sobre un vigilante quien, con una escopeta, retenía contra su voluntad a su esposa y cuatro hijos dentro de una vivienda.
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“Se encontraba al interior de la vivienda con su señor esposo que la tenía amenazada”, dijo la comisaria de familia de Villagorgona, Jenny Getial.
En tierra, los hombres del Grupo de Operaciones Especiales esperaban el resultado de una negociación telefónica.
“Por favor, abre la puerta y deja salir a los niños”, le solicitaba una de las negociadoras al hombre armado.
Mientras tanto en el aire, una aeronave estaba lista para un eventual traslado a Cali. En tierra, una familiar de las víctimas logró que el vigilante abriera la puerta de la casa para que salieran los menores de edad.
“No queríamos afectar, ni siquiera, a la persona que estaba arriesgando la vida de su esposa y sus propios hijos”, detalló el general Manuel Vásquez, comandante de la Policía de Cali.
Sin pensar en el riesgo del hombre armado con una escopeta, la comisaria de familia corrió hasta la casa, cargó a uno de los niños y detuvo su paso para tomar de la mano a otro más.
“Gracias a Dios todo culminó exitosamente, no hubo necesidad de llegar a la fuerza, a pesar de que todo estaba dispuesto, había suficiente personal de apoyo, pero gracias a la persuasión, logró culminar exitosamente este procedimiento”, señaló María Teresa Lúligo, personera de Candelaria.
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Los cuatro menores entre los 2 y 14 años fueron valorados por paramédicos y luego puestos bajo protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, y su mamá llevada a un centro médico para recibir apoyo psicológico.
Por su parte, el agresor iniciará un tratamiento de salud mental mientras enfrenta su proceso judicial.