Esclavitud, las mafias del engaño: aumentan las denuncias por trata de personas en Colombia

La trata de personas o comercio de seres humanos es la forma de esclavitud del siglo XXI. 

“Es un delito que es considerado una vulneración a la autonomía, a la capacidad del ser humano de tomar una decisión, pero a la vez una explotación porque hay un tercero que se enriquece tratando de limitar la autonomía o la libertad de otro ser humano”, aseguró Carlos Andrés Pérez, coordinador del programa de trata de personas de la ONU.

En Colombia este delito se ha hecho más visible y por lo tanto las investigaciones se han incrementado. Entre abril del 2016 y abril del 2018, la Fiscalía conoció de 488 casos concentrados en Bogotá, Valle del Cauca, Risaralda y Antioquia. 

“En la trata interna nosotros tenemos casos por supuesto en Fontibón que es el lugar, donde ingresan las víctimas, es decir a través del aeropuerto y el Terminal de Transportes, pero así mismo en la localidad de Suba y en la localidad de Ciudad Bolívar. En la trata externa tenemos casos reportados desde Catar, el sudeste asiático; tenemos casos provenientes de China, desde Nicaragua y desde otros países latinoamericanos”, señaló Francisco Pulido, subsecretario de Gobierno de Bogotá.

Sin embargo, estas cifras tienen un subregistro. Según Naciones Unidas, por cada caso de trata de personas reportado puede haber 20 víctimas más que se están desconociendo. 

“Las condiciones de vulnerabilidad son tan altas que muchos hombres, mujeres y niños aceptan una oferta porque es la única opción que tienen, pero termina en una situación de explotación. Se han incrementado el número de casos de colombianos y colombianas explotadas en países centroamericanos en países del cono sur como Argentina, como Chile”, indicó Pérez.

La explotación más conocida es la sexual, sin embargo, miles de víctimas alrededor del mundo son objeto de trata con fines de trabajo forzoso, servidumbre doméstica, mendicidad o extracción de órganos. 

“Se presentan con mayor frecuencia víctimas de matrimonio servil, mujeres que bajo una promesa amorosa son llevadas al exterior y allá son explotadas sexual y laboralmente y no se reconocen como víctimas porque creen que fue un fracaso amoroso cuando en realidad han sido víctimas de trata de personas”, afirmó Andrea Bravo, directora de la Fundación Marcela Loaiza. 

 “El 71 % de los casos ocurre sobre mujeres y niñas. De ese 71 %, el 51 son mujeres mayores de 18 años y el 20 por ciento niñas”, aseveró el coordinador del programa de trata de personas de la ONU.

Cerca del 40 % de los casos de trata de personas en el mundo ocurren dentro de las fronteras del mismo país.

Esta esclavitud no tiene estrato social, es un delito que juega con los sueños de las personas.