Dependientes del VAR
En la Copa BetPlay quedó demostrado lo necesaria que es la herramienta del VAR para los árbitros que ya temen que alguien no los corrija.
08:20 a. m.
La llegada del VAR al fútbol mundial generó todo tipo de reacciones en 2016 y aunque las dudas de la utilización de la herramienta siguen apareciendo entre los analistas después de ocho años, lo cierto es que la asistencia de video cada vez se hace más necesaria para los árbitros y en la Copa Colombia se ha podido evidenciar fácilmente.
Cuando el Video Assistant Referee no había llegado al fútbol, el cuerpo arbitral (tres o cinco en su defecto) debían tomar decisiones en cuestión de segundos para impartir justicia en un deporte que genera muchas pasiones y en el que las determinaciones de estos profesionales juegan un papel fundamental, tanto para el espectáculo, como para los objetivos de cada uno de los equipos.
Dependientes del VAR
Sin embargo, con el arribo de la tecnología al deporte número del mundo, los árbitros tienen más posibilidades de equivocarse dentro del campo, pues sus ayudantes en el VAR pueden repetir las acciones las veces que sean necesarias, hacer un llamado y así corregir sus errores.
Pero ahí está el problema, tanto de los cuerpos arbitrales actualmente, como de lo insólito del fútbol colombiano, donde todavía se disputan torneos profesionales sin la herramienta que brinda mayor justicia en cada uno de los encuentros.
Y es que claramente los árbitros centrales se volvieron dependientes del VAR. En la Liga saben que si se equivocan, inmediatamente sus ayudantes pueden llamarlos a revisar la jugada y corregir su decisión, pero en Copa, su 'modus operandi' es distinto, por lo que a mí parecer les da miedo equivocarse y por tal razón dejan de señalar faltas claras.
Atlético Nacional ya se había visto perjudicado hace un par de semanas cuando visitó Valledupar en la ida de los octavos de final de la Copa y enfrentó a Alianza. Allí, el árbitro central Luis Matorel señaló una pena máxima insólita a favor del equipo local en la que el juez vio una falta (todavía me pregunto dónde) de Andrés Felipe Román sobre uno de los delanteros del equipo vallenato.
Al no contar con la herramienta del VAR, Matorel tuvo que mantenerse en su decisión inicial a pesar de los reclamos de los jugadores del cuadro verdolaga. Alianza terminó empatando y Nacional se vio perjudicado ante la inexistencia de la herramienta, la inoperancia del cuerpo arbitral y su clara dependencia del Video Assistant Referee.
Para otra muestra, lo que ocurrió en el estadio Américo Montanini en la noche de este martes 8 de octubre en el juego entre Millonarios y Atlético Bucaramanga.
Nolberto Ararat tuvo una noche desastrosa, en la que dejó de pitar al menos dos penas máximas claras a favor de Millonarios (equipo que terminó eliminado de la Copa) y ante la ausencia, una vez más, del VAR, el juez central es el máximo señalado.
A pesar de intentar demostrar tranquilidad y seguridad en sus decisiones, Ararat es un claro ejemplo de la dependencia de los árbitros colombianos por el VAR.
Por su temor a equivocarse y “beneficiar” a un equipo, sin tener la posibilidad de revisar la jugada, termina perjudicándolo y dañando el trabajo de meses y la ilusión de todo un plantel.
¿Y dónde están las consecuencias para quienes dañan el trabajo de todo un semestre de un equipo? La herramienta del VAR es necesaria en absolutamente todos los juegos del fútbol profesional colombiano y así como en varias oportunidades a los jugadores se los sanciona de oficio, los árbitros también deberían tener castigos ante su falta de determinación y capacidades en juegos decisivos.