Oración a San Benito para alejar a las malas intenciones

La oración de San Benito de Abad para alejar malas intenciones y personas, es un rezo muy común entre varias personas devotas al catolicismo, es de decir que San Benito de Abad es un santo muy poderoso que te puede proteger de muchas cosas, ante maleficios ante el mal, malos pensamientos y maldiciones, justo por eso es que este es un Santo muy poderoso.

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El poder de este santo recae sobre todo en su medallón “el medallón de San Benito de Abad” este medallón por su poder de purificación y protección tiene muchos usos a la hora de proteger o deshacer males; justo por eso es que se utiliza en la práctica de muchos exorcismos.

¿Cuándo y cómo hacer el rezo?

Antes de realizar cualquier tipo de oración necesitamos tener fe, la fe es lo que nos hará tener a nosotros la confianza plena en que las oraciones van a funcionar. Otro punto para tener en cuenta es ser totalmente sincero, sin la sinceridad no vas a lograr nada.

Este rezo es bueno realizar en las mañanas al levantarnos, antes de salir a nuestros trabajos para empezar con buen pie nuestra cotidianidad, para todos aquellos que viven en un mal vecindario o en una mala zona o si sales de tu hogar muy tarde por las noches.

Bienaventurado y amado,
San Benito hoy recurro a ti:

Primeramente, pido por tu intersección,
Por tus muchos milagros hoy se conoce tu nombre,
hoy se conocen tus poderes,
de protección y hoy te imploro,
que sensibilicen tu corazón y me escuches.

Tú que me miras con fragilidad y dolor,
tú que te aferraste a la oración,
y pensaste en el pecado como tú solo pudiste,
tú qué sabes cuánto daño hacen esos pecados.

Oh Santo redentor hoy pongo en tus manos,
todas aquellas personas,
que quieran atentar en contra de mi vida.

Me entrego a ti en alma y cuerpo,
a pedirte que me envuelvas,
en tu manto de protección,
y me acojas como si fuera un discípulo vuestro.

Además te imploro que me alejes,
de mi todas esas malas personas,
con malas intenciones o malos pensamientos,
te pido que hagas justicia y no permitas,
que su mal me perjudique de ninguna manera.

De manera tal, hoy vengo con mucha,
humildad y te pido de rodillas,
que me escuches con tu misericordia.

Así mismo te pido que no permitas,
que nada malo me pase nada,
ni a mí, ni a mi familia.

Ahora bien la fe es la garantía de lo que se espera
y no me descuides quiero sentirme que estoy protegido
contigo tanto de día como de noche,
igualmente eternamente.

Por favor aleja de mi,
todo aquellos esos males o personas,
que vienen en contra de mi,
con intenciones pecaminosas.

Protégeme y dame cobijo,
porque es en ti quien pienso en estos,
momentos de necesidad,
igualmente te imploro,
que me escuches con tu gran corazón.

Pues este mundo está plagado,
de personas malas,
pues este mundo está lleno,
de pecados y no saben lo que hacen.

Te pido que me des sabiduría y entendimiento,
ante la adversidad,
además te pido que remedies nuestras necesidades,
espirituales y corporales.

Que tu misericordia llegue a manos de
nuestro señor Jesucristo,
y seas quien intercedas por mí ante él.

Amén.

¿Qué es lo que aporta esta oración?

Esta maravillosa oración tiene muchísimo poder para alejar cualquier tipo de mal espiritual o corporal o maldiciones hasta maleficios en tu contra, de verdad que tiene un poder magnífico, y claro que todo se debe a nuestro hoy Santo Benito de Abad.

Ya que fue él quien realizó grandes milagros a enfermos. Esta oración se puede utilizar en varias circunstancias de nuestra vida, si nuestra vida está en peligro, si tenemos algún pesar, si sabemos que tenemos algún tipo de enfermedad. Y con muchos usos tienes que tener mucha fe al rezarlo.

Al finalizar la oración siempre es bueno agregar tres padres nuestro, ave marías y glorias, al levantarnos y al culminar nuestras jornadas a diario y vuelvo a decirlo, este rezo tiene mucho poder en contra de todo tipo de males.

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