Habitantes del barrio María Paz denuncian crítica situación de inseguridad: así viven

A ojos de muchos, pareciera que Bogotá atraviesa un grave problema de seguridad en varias zonas, pues son numerosas las denuncias de ciudadanos afectados y cansados de esta situación. Tal es el caso de los habitantes del barrio María Paz, en la localidad de Kennedy, quienes aseguran sentirse abandonados por las autoridades.

La inconformidad de los vecinos es tanta que, por su cuenta, decidieron instalar rejas en las calles para proteger a sus familias, sin embargo, siguen exigiendo a las autoridades locales regular actividades como el reciclaje y las ventas informales.

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La situación en el barrio María Paz

Con rejas amarillas en la entrada y salida de las calles, los habitantes del barrio María Paz, en la localidad de Kennedy, encontraron la solución para evitar el paso de recicladores y tanta contaminación hasta la puerta de sus viviendas.

Nelsy Téllez, una de las habitantes del sector, contó a Noticias RCN que las rejas se convirtieron en la única opción para proteger las calles de su barrio, sin embargo, dijo que esto no solucionó la problemática que viven a diario.

Hace más de 20 años, los vecinos conviven con bodegas de reciclaje, pero denuncian que esto se ha convertido en una fachada para cometer toda clase de delitos, sobre todo después de la pandemia y la ola de migración al interior de la ciudad.

Justamente, una de las calles que atraviesa el barrio, cambió su nombre en 2017, durante la administración de Enrique Peñalosa, de la ‘calle del cartuchín’ a la ‘calle de la esperanza’; no obstante, han pasado varios años y lo que dicen sus habitantes es que aquí no hay esperanza, sino contaminación, habitantes de calle, consumo de estupefacientes y enfermedades para sus habitantes.

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Además, denuncian que las autoridades no han ayudado con el sostenimiento del barrio, por lo que la situación es cada vez más crítica.

De acuerdo con la Alcaldía Local de Kennedy, esta iniciativa es prohibida porque privatiza el espacio público, por lo que adelantan mesas de trabajo para atender estas problemáticas. Lo cierto es que los vecinos se cansaron de esperar, pues en la noche la situación es aún más fuerte.