Sicarios asesinaron a trabajadores de un taller en Santander: los tenían extorsionados
Las cámaras grabaron los dos crímenes ocurridos en Barrancabermeja hace dos meses.
Noticias RCN
12:52 p. m.
En los últimos días, las autoridades capturaron a 10 miembros que pertenecían a la banda ‘Los de la M’, la cual se dedica a extorsionar y asesinar comerciantes en Santander.
El accionar delictivo de estas personas se centró en Barrancabermeja. A través de un robusto operativo, fueron capturados ‘Mami’, ‘Modo avión’, ‘Marly’, ‘Pimienta’, ‘Peñate’, ‘Brayan’, ‘Pereira’, ‘Jacsury’, ‘Danny’ y ‘Erika’.
10 capturados recibían órdenes desde la cárcel
De igual forma, fueron incautadas una pistola tipo Prieto Beretta, 40 cartuchos calibre 9mm, 15 cartuchos calibre 38, cinco motocicletas, 263 gramos de marihuana y 12 celulares.
‘Los de la M’ se dedican a extorsionar comerciantes con pagos de 25 a 100 millones de pesos. Cuando alguno no cumplía, no dudaron en acabar con su vida. Recientemente cometieron dos homicidios en un taller de motos del barrio Primero de Mayo.
El cabecilla detrás de esta estructura y que le impartía órdenes a los diez capturados fue identificado como ‘Cachama’. A pesar de estar preso en el Centro Penitenciario de Alta Seguridad de Ibagué, esta persona seguía al tanto las extorsiones y asesinatos.
El modus operandi de la banda
La Policía reveló cómo eran los panfletos extorsivos y videos obtenidos de las cámaras de seguridad con los homicidios. Las amenazas eran enviadas en hojas que decían: “Tiene 5 minutos para escribir al Whasaap 310*******”.
Uno de los crímenes ocurrió el 3 de junio de este año. Cercanas las 9:00 p.m., un hombre estaba atendiendo a tres personas en el taller Alkana Motos. Todo estaba normal hasta que llegó un motorizado.
Este hombre se bajó de la moto, llegó corriendo al mostrador y sin mediar palabra le disparó más de una vez al trabajador. Los clientes salieron corriendo mientras el sicario seguía acribillando a la víctima.
Otro video, con fecha del 7 de julio; mostró el segundo crimen ocurrido en el taller. A diferencia del primero, este se dio a plena luz del día. El modus operandi fue el mismo, el trabajador estaba atendiendo a los clientes. El sujeto en moto se le acercó y le disparó varias veces.

