Feminicidio de Rosa Elvira Cely: 12 años del crimen que modificó la justicia en el país
Tras el crimen cometido contra Rosa Elvira Cely, el 24 de mayo del 2012, inició la lucha por la tipificación del feminicidio como un delito autónomo en el país.
Noticias RCN
07:25 p. m.
El 24 de mayo del 2012, Rosa Elvira Cely, de 35 años, fue violada, torturada y asesinada por Javier Velasco, un compañero de estudio que la llevó hasta el Parque Nacional y la sometió a todo tipo de vejámenes.
Durante cuatro días, Rosa Elvira luchó por su vida en la UCI del Hospital Santa Clara, en donde falleció el 28 de mayo.
Su caso marcaría un antes y un después en la justicia colombiana y en la forma de juzgar los crímenes cometidos en contra de las mujeres, niñas y adolescentes en el país.
Así se tipificó el feminicidio en Colombia
Tres años más tarde, en julio del 2015, se aprobó la Ley 1761, la cual lleva su nombre, y que tipificó como delito autónomo los feminicidios como la máxima expresión de la violencia y la discriminación estructural contra las mujeres.
Javier Velasco, el feminicida de Rosa Elvira, quien ya tenía antecedentes por otros ataques a mujeres, incluidas sus hijastras, cumple una condena de 48 años en la cárcel La Picota, una de las penas más altas permitidas por la justicia colombiana.
Este sábado, múltiples personas se reunieron en el Parque Nacional, alrededor de la placa conmemorativa de Rosa Elvira, para recordar uno de los crímenes que estremeció al país.
Un homenaje a la memoria de Rosa Elvira Cely
Aunque el feminicidio de Rosa Elvira se convertiría más adelante en la puerta para que, a través del Congreso de la República, se buscara el reconocimiento de este delito dentro del Código Penal Colombiano, en la práctica los retos siguen siendo muchos.
Cada año, en Colombia son asesinadas cientos de mujeres, principalmente a manos de sus parejas o exparejas sentimentales. A pesar de las múltiples alertas, la violencia contra las mujeres sigue siendo una realidad.
Adriana Cely, hermana de Rosa Elvira y una de las mujeres que luchó para que la Ley 176 fuera un hecho, asegura que el Distrito tiene que responsabilizarse por las violencias que siguen perpetrándose en contra de la mujeres en Bogotá.