Rescataron a perros usados como carnada en peleas ilegales en Bogotá, pero su dueño los raptó
La fundación Patitas de la Protesta los rescató y denunció que podrían haber sido utilizados como carnada en peleas ilegales. Su paradero ahora es incierto.
Noticias RCN
07:55 a. m.
Dos perros, Clank y Booble, fueron hallados en un cerro de la localidad de Ciudad Bolívar, Bogotá, en condiciones alarmantes.
Según la fundación animalista Patitas de la Protesta, quien lideró el rescate, el caso tendría una posible conexión con las peleas clandestinas de perros, donde animales vulnerables son utilizados como sparring, una práctica ilegal y violenta.
Rescataron a dos perros usados como carnada en peleas ilegales en Bogotá
Los dos perros, bautizados por la fundación como Clank y Bobble, fueron encontrados abandonados y enfermos en una zona alta de Ciudad Bolívar. Presentaban lesiones faciales, infecciones activas, temperatura elevada, signos de desnutrición y un evidente deterioro físico.
Lo que relata la fundación en sus redes sociales es que ambos animales dormían al aire libre, sin refugio, “prácticamente en un cerro” y únicamente se tenían el uno al otro.
Ante la gravedad del hecho y pese a que el refugio se encontraba colapsado, Patitas de la Protesta asumió la custodia de los perros para garantizar su atención inmediata y evitar que fueran nuevamente víctimas de maltrato.
Los trasladaron a la clínica veterinaria Makai, donde comenzaron a recibir tratamiento médico. Uno de ellos requería cirugía ocular, y ambos estaban sin castrar y sin ningún tipo de identificación o control sanitario reciente.
Dueño se llevó sin autorización a los dos perros rescatados en Bogotá
Sin embargo, la situación cambió cuando un hombre se presentó en la clínica asegurando ser el dueño de Clank y Bobble. Como único respaldo mostró un carnet de vacunación vencido desde 2021.
Aunque la fundación reconoció que efectivamente era el propietario legal, también lo señaló como una persona negligente y reincidente, que en ocasiones anteriores ya había perdido a los animales.
La fundación explicó que había acordado con este sujeto que los perros continuarían bajo tratamiento médico, pero denunció públicamente que, esa misma tarde, el hombre los retiró sin autorización, engañando al personal veterinario.
Aclaramos que desde la Fundación NO se autorizó su salida, y la auxiliar fue víctima de ese engaño.
Desde ese momento, el paradero de Clank y Bobble es incierto. La fundación teme que hayan regresado a un entorno inadecuado, donde continúan sin ser vacunados y sin esterilización.

