Elevan la alerta en volcán Puracé: de amarilla a naranja por incremento en su actividad
Desde el martes, los equipos del Servicio Geológico Colombiano detectaron movimientos anómalos en el cráter.
Noticias RCN
11:34 a. m.
El Servicio Geológico Colombiano (SGC) elevó, este sábado 29 de noviembre, de amarilla a naranja la alerta en el volcán Puracé, ubicado a 25 kilómetros lineales de la ciudad de Popayán, y aún más cerca de poblaciones como Coconuco, Chapío y Cristales. De acuerdo con su directora técnica de geoamenazas, Nathalia Contreras:
“El cambio de estado se debe a que, desde el observatorio vulcanológico y sismológico de Popayán hemos detectado una variación significativa en la energía y la recurrencia de los sismos, asociados al movimiento de fluidos al interior del volcán; lo que quiere decir que el magma en su interior se está moviendo y es mucho más inestable todo el sistema”.
En concreto, la entidad detectó un incremento significativo en la actividad del volcán, que hace parte de la cadena de los Coconucos, asociado a movimientos de fluido, emisión de gases y columnas de ceniza.
La última vez que Puracé entró en erupción fue en marzo de 1977 y las demás estructuras de la cadena; es decir, el volcán Pan de Azúcar y el volcán Coconuco se mantienen inactivos.
SGC insiste en que “hay tiempo” para prepararse ante una eventual erupción:
Contreras explicó que, “si bien desde el día martes habíamos estado registrando columnas de gases y la emisión de cenizas, a través de nuestras cámaras web, las manifestaciones del volcán se han vuelto mucho más frecuentes en las últimas horas”.
De acuerdo con la entidad, el volcán presentará fluctuaciones en sus niveles los próximos días; lo que no implica que esté retornando a una fase de estabilidad, que permita degradar la alerta a amarilla.
La directora técnica de geoamenazas insiste en que “el volcán nos está advirtiendo que es posible una erupción significativa que afecte a las poblaciones cercanas, pero podría no ocurrir. Hay tiempo para que comunidades y autoridades se preparen a un evento de mayor energía”.
Hasta entonces, se recomienda a la comunidad de poblaciones aledañas no acercarse a la zona del cráter, debido a que corren un gran riesgo de verse afectados por la inhalación de gases.

