Video involucraría a Richard Aguilar con hechos de corrupción en obras del estadio Alfonso López

Richard Aguilarvolvió a ser protagonista de uno de los casos judiciales más movidos de estos días. Se trata de las irregularidades en el contrato por más de 20 mil millones de pesos para el reforzamiento del estadio Alfonso López, de Bucaramanga.

En ese escándalo estaría involucrado el exgobernador de Santander, varios de sus funcionarios y un contratista, quienes fueron capturados en las últimas horas. Noticias RCN tiene detalles exclusivos de la investigación. 

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Se trata del exasesor de la gobernación de Santander Julián Jaramillo y el contratista Octavio Reyes. Ambos fueron imputados por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos, cohecho y peculado por apropiación todo en el marco de la celebración de un contrato de 22 mil millones de pesos para reforzar el principal escenario deportivo de los santandereanos.

La prueba reina para involucrar a Richard Aguilar

De acuerdo con la Fiscalía, Julián Jaramillo acordó el pago con el contratista Octavio Reyes de dineros indebidos para él y otros funcionarios públicos por la adjudicación irregular de ese contrato correspondientes al 16 % del valor total del contrato; de los cuales el 10 %, dicen testigos, sería para el entonces gobernador Richard Aguilar, el 3 % para la secretaria de infraestructura Claudia Janeth Toledo y el otro 3 % para Jaramillo, como director de proyectos de infraestructura.

Una de las pruebas que tiene el máximo ente acusador es un video en el que una persona de la cual aún no revelan su identidad recibe varias bolsas de dinero. El material audiovisual habría sido grabado para la época del contrato. Allí el hombre que graba menciona a "don Julián", quien sería Julián Jaramillo, mano derecha de Aguilar.

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Además, menciona también a "Marino", quien para los investigadores se trataría de Rubiel Marino Bermúdez, persona que trabajaba como contratista por prestación de servicios, en la administración de Aguilar como conductor y mensajero de Jaramillo.

La Fiscalía además constató que, durante la etapa de ejecución del contrato se entregó un anticipo del 50% del valor del contrato. Seis meses después del inicio del proyecto, fue autorizada una adición presupuestal sin que las obras avanzaran según lo previsto en el cronograma.

Para este trámite, supuestamente, se utilizaron 18 documentos falsos (facturas y cuentas de cobro). De igual manera, para justificar los desembolsos, se incluyeron precios unitarios con exagerados sobrecostos y cobros por actividades que no se realizaron.

Al final,los imputados no aceptaron cargos y fueron privados de su libertad por el tiempo en el que avanza el proceso. Todo esto, mientras que en la Corte Suprema de Justicia avanza el proceso en contra de Richard Aguilar.

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