Más de 1.400 muertos deja devastador terremoto en Afganistán
Un sismo de magnitud 6 en la frontera con Pakistán se convirtió en una de las tragedias más graves en décadas para Afganistán.
AFP
06:39 a. m.
El potente terremoto que sacudió el este de Afganistán en la medianoche del domingo ya deja más de 1.400 muertos y al menos 3.000 heridos, según cifras actualizadas de las autoridades publicadas este martes.
Un balance que no deja de aumentar
El epicentro se localizó a 27 kilómetros de Jalalabad, capital de Nangarhar, a solo ocho kilómetros de profundidad, lo que aumentó la fuerza destructiva en las provincias montañosas de Nangarhar, Kunar y Laghman.
Kunar es la zona más afectada, con 1.411 fallecidos y más de 3.100 heridos, según informó Zabihullah Mujahid, portavoz del gobierno talibán. En Nangarhar se reportan al menos diez muertos y cientos de lesionados, mientras que en Laghman decenas de personas resultaron heridas.
Las operaciones de rescate continúan entre las ruinas de más de 5.000 viviendas destruidas, muchas de ellas de barro y piedra, construidas en valles escarpados.
“Las operaciones de emergencia continuaron durante toda la noche”, afirmó Ehsanullah Ehsan, jefe de la autoridad de gestión de desastres en Kunar. Naciones Unidas advirtió que los efectos del terremoto y sus réplicas podrían impactar a “cientos de miles” de personas y que la cifra de víctimas aún podría aumentar de manera “exponencial”.
Solidaridad y ayuda internacional
Mientras las familias entierran a sus muertos en medio de escenas de dolor, la comunidad internacional empieza a movilizarse. El secretario general de la ONU, António Guterres, anunció la activación de un fondo de emergencia de cinco millones de dólares, y la Unión Europea confirmó el envío de 130 toneladas de ayuda humanitaria esta misma semana, además de un millón de euros en apoyo a organizaciones que ya trabajan en el terreno.
Afganistán, uno de los países más pobres del mundo y afectado por décadas de conflicto, enfrenta enormes dificultades para responder a la emergencia, agravadas por la reducción drástica de la asistencia internacional en los últimos años. En 2023, un sismo en la región de Herat dejó más de 1.500 muertos, una tragedia que ahora vuelve a repetirse en otra parte del país.

