Ola de calor pone en alerta roja a París y provoca cierres de escuelas en Europa
Europa sufre una ola de calor histórica con alertas rojas, cierres de escuelas, récords de temperatura y el impacto creciente del cambio climático.

AFP
05:58 p. m.
París enfrenta este martes una de las olas de calor más intensas y tempranas de los últimos años, con temperaturas cercanas a los 38 °C que han obligado a cerrar más de 1.900 escuelas en Francia y a clausurar temporalmente el último piso de la Torre Eiffel.
La capital francesa, que no había activado una alerta roja por calor desde hace cinco años, se une así a una larga lista de ciudades europeas en emergencia por las condiciones extremas.
Desde Portugal hasta Croacia, pasando por Alemania, Austria, Suiza, Grecia y los Países Bajos, gran parte del continente europeo se encuentra bajo alertas por calor extremo.
La ONU ha calificado este fenómeno como un “asesino silencioso”, y los científicos insisten en que el cambio climático está intensificando estos eventos.
"Como resultado del cambio climático provocado por el hombre, el calor extremo se está volviendo más frecuente, más intenso. Es algo con lo que tenemos que aprender a vivir", advirtió Clare Nullis, portavoz de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Escuelas cerradas y récords de temperatura en Europa
La ola de calor ha alterado el funcionamiento de instituciones educativas y provocado récords históricos de temperatura en varios países. En Róterdam, Países Bajos, las escuelas terminaron clases al mediodía para evitar exponer a los estudiantes a temperaturas de hasta 38 °C.
En Alemania, la tradición del “hitzefrei” ha permitido a los escolares comenzar vacaciones anticipadas ante la previsión de hasta 40 °C.
España, por su parte, vivió el junio más caluroso jamás registrado con una media de 23,6 °C, mientras que en Portugal se alcanzaron los 46,6 °C en la localidad de Mora.
La climatóloga Samantha Burgess, del observatorio europeo Copernicus, señaló que este evento no solo es extremo, sino también inusualmente temprano en la temporada, una señal clara de los efectos del cambio climático.
España en alerta: muertes, incendios y noches sin tregua
En medio del sofocante calor, se registró una tragedia en España: un niño de dos años falleció tras pasar varias horas en un coche estacionado al sol en la localidad catalana de Valls.
Las autoridades calificaron el hecho como un posible caso de negligencia y abrieron una investigación. Mientras tanto, ciudades como Barcelona han activado protocolos para proteger a poblaciones vulnerables y repartir agua entre personas sin hogar.
La situación es crítica también en el sur del país. En Sevilla, donde se alcanzaron los 41 °C, la televisión regional incluso repitió su tradición de “freír un huevo en la calle” para ilustrar el calor extremo.
Aunque algunas regiones experimentan un leve descenso en las temperaturas, los pronósticos advierten nuevos picos por encima de los 43 °C. Además, el riesgo de incendios forestales se mantiene alto: en Turquía, más de 50.000 personas han sido evacuadas por fuego, principalmente en Esmirna.