Pedro Castillo, expresidente de Perú, condenado a 11 años de cárcel por fallido golpe de Estado
El exmandatario, en 2022, intentó disolver el Parlamento, por lo que fue acusado de rebelión.
AFP
03:42 p. m.
El expresidente de Perú, Pedro Castillo, fue condenado este 27 de noviembre a 11 años y medio de prisión por rebelión, tras su fallido intento de disolver el parlamento en diciembre de 2022.
En medio del proceso, Castillo fue absuelto de los delitos de abuso de poder y de perturbación del orden público. La fiscalía había solicitado 34 años de prisión por todos los cargos, sin embargo, la Corte Suprema de Justicia decidió:
Condenar a José Pedro Castillo Terrones como coautor del delito contra los poderes del Estado y el orden constitucional en la modalidad de conspiración para una rebelión (...) y como tal se le impone al sentenciado 11 años, 5 meses y 15 días de pena privativa de libertad de carácter efectivo.
Dos expresidentes de Perú condenados en tan solo 24 horas
El expresidente de 56 años recibió con calma la sentencia, que podría ser apelada.
La condena llega un día después de que el expresidente de centroizquierda Martín Vizcarra (2018-2020) fuera sentenciado a 14 años de prisión. Vizcarra fue hallado culpable de aceptar sobornos mientras se desempeñaba como gobernador de la región Moquegua hace 11 años.
El exjefe de Estado se encuentra privado desde hace tres años en una cárcel exclusiva para exmandatarios ubicada dentro de una base policial al este de Lima. Ahora deberá permanecer tras las rejas hasta el 21 de mayo de 2034.
Además de Castillo, en Perú están presos los exmandatarios Vizcarra, Ollanta Humala (2011-2016) y Alejandro Toledo (2001-2006), todos por cargos de corrupción.
El paso de Pedro Castillo por la Presidencia de Perú
Castillo, un maestro de escuela rural y sindicalista que ganó contra todo pronóstico las elecciones en 2021, fue el primer presidente de Perú sin lazos con las élites.
Su gobierno, que generó esperanzas de reformas en un país con un tercio de la población en pobreza, zozobró arrastrado por acusaciones de corrupción en medio de su vano intento de disolver el Congreso para evitar ser destituido.
La exprimera ministra Betssy Chávez, asilada desde el 3 de noviembre en la embajada de México en Lima, también recibió una pena de 11 años y medio de prisión.


