Horacio defendió con uñas y dientes a Adelaida de los ataques de Carla

La vida de Adelaida se ha convertido en una montaña rusa desde que se supo su romance con Horacio. Después de que se destapó la relación que llevó al declive del matrimonio de Ana y Horacio, la abogada de 32 años ha tenido que lidiar no solo con la separación de la familia Valenzuela Ocampo, sino también con los comentarios de los más cercanos a ellos.

Cuando por fin Horacio firma el divorcio y le pide a Adelaida que sea su esposa, no todo ha sido color de rosa como ella lo esperaba. En el último encuentro con la familia del arquitecto, cuando Ana le cedía sus acciones de la empresa a sus hijos, y ella sorpresivamente fue llamada como la abogada para llevar a cabo el traspaso, Dolores, la exsuegra de Horacio, quien estaba en representación de Florencia, trató de humillarla de diferentes maneras.

Aunque Adelaida mantuvo la compostura y le dejó claro quién era ella, se sintió sumamente abrumada. Por esta razón le dijo a Horacio que estaba cansada de que todo el mundo la viera como el verdugo de la historia.

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El reclamo de Horacio a Carla

Evidentemente, Horacio no le dijo nada respecto a Dolores, pues le conviene estar bien con ella. Pero con quien no se quedó callado fue con Carla, la secretaria de la Presidencia de Hova Arquitectura. Le dijo que mantuviera su lugar y que respetara a la mujer que, le gustara o no, iba a ser su esposa.

Le advirtió que no interviniera en el camino de Adelaida porque eso le podría traer consecuencias. En vista de lo que le dijo Horacio, Adelaida recurrió a Dolores y le dijo lo que estaba pasando para que pudiera proteger su trabajo, pues sintió miedo de que la pudieran despedir. Efectivamente, Dolores encaró cariñosamente a Horacio y le dijo que no se metiera con el trabajo de Carla.

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Joaquín despertó celos en Ana

Ana finalmente logró ser contratada por Luciano Ukross. Inmediatamente, fue al apartamento de Joaquín para contarle que ya tenía trabajo como arquitecta, pero al llegar se encontró con una sorpresa.

Su joven novio estaba acompañado de otra mujer. Joaquín le explicó que se trataba de la practicante que estaba buscando, a lo que Ana le refutó que debió hacer más entrevistas para elegir a la persona correcta.

Ana vio la sospechosa empatía de la practicante con su novio y esto le generó inseguridades y unos inminentes celos. 

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