La insólita historia de la mujer que excitaba a un delfín para raro experimento

Un experimento de la Nasa que buscaba establecer una comunicación directa entre delfines y humanos terminó en una insólita práctica sexual que logró desprestigiar los resultados de la investigación ante el apego del cetáceo macho y la mujer que lo entrenaba.

Se trata Margaret Howe Lovatt, una naturalista entregada que creció con animales que para ella hablaban. Desde muy pequeña esto la llevó a inspirarse para adentrarse al mundo de la biología y las ciencias naturales.

Con apenas 23 años recibió la propuesta que marcaría su vida para siempre. Un científico conocido como Gregory Bateson la invitó a colaborar indirectamente con un experimento que buscaba  enseñarle a un animal cómo comunicarse con un humano a partir del lenguaje verbal.

La investigación intentaba enseñarle a hablar a tres delfines: Sissy, Pamela y Peter. 

Luego de ser observada detenidamente, el científico decidió que Lovatt estaba completamente apta para preparar a uno de sus delfines para comunicarse verbalmente con un humano. Ante la aceptación en el proyecto la joven tuvo que escoger a uno de los delfines para iniciar el estudio: ella determinó que Peter era el más adecuado, pues no tenía ningún tipo de entrenamiento relacionado con el sonido de la voz humana.

Le puede interesar: En video: mono se subió sobre el cadáver de su dueño y lo despidió con un beso

La relación entre la mujer y el delfín

Lo que relata el documental que detalla la vida de la naturalista durante este experimento es que la joven permaneció por varios meses viviendo dentro de un lugar milimétricamente creado para que pudieran convivir día y noche con los delfines del estudio.

El apego entre Lovatt y Peter se hizo inquebrantable, pues ninguno tomó en cuenta que Peter, el único delfín macho, estaba en una edad reproductiva en la cual podía excitarse con facilidad.

Elegí trabajar con Peter porque él no había tenido ningún entrenamiento de sonido similar al humano y los otros dos sí, explicó Lovatt en el documental.

Poco después, la conexión entre Peter y su entrenadora humana comenzó a tornarse un poco extraña. El delfín tenía impulsos sexuales por ella.

Sin embargo cuando se filtró la información de que la naturalista estimulaba al delfín cuando se frotaban sus cuerpos, el experimento se fue a la basura y se desató un escándalo mediático.

Vea también: En video: El curioso caso de las ovejas que llevan días caminando en círculos

¿Qué pasó con el delfín al descubrirse la conexión sexual con su entrenadora?

La relación entre Peter y su entrenadora llegó a ser tan íntima que era muy complicado hacer llegar al delfín al lugar donde estaban sus compañeras Sissy y Pamela, ni siquiera su propia especie podía alejarlo de Lovatt.

Esta situación comenzó a retrasar el estudio y convertirlo en un vínculo sexual entre el animal mariño y la joven que buscaba enseñarlo a comunicarse de manera verbal.

Aunado a este escabroso escándalo se le sumó la teoría de que trabajaban con drogas LSD en los mamíferos, lo que hizo que rápidamente el proyecto se quedara sin fondos y se vieron en la obligación no solo de abandonar la investigación, sino de cerrar las instalaciones.

Lovatt se apartó inmediatamente del estudio, mientras que Peter fue trasladado a otro laboratorio junto a Sissy y Pamela, pero poco después se conoció que su estado anímico estaba tan bajo al ser separado de la humana que le generaba excitación sexual, que terminó muriendo a una corta edad, pues se trataba de un delfín muy joven.

Lea, además: Crueldad animal: mujer fue grabada tirando crías de gatos a un río