Daniel Muñoz: de su pasión por los caballos, a estrella de la Selección Colombia
El futbolista antioqueño habla sobre sus raíces, su ascenso al estrellato y cómo devuelve a su comunidad a través de su fundación.
Daniel Muñoz, paisa y estrella de la Selección Colombia, compartió su inspiradora historia de superación y éxito en entrevista con Noticias RCN.
Desde sus humildes inicios en El Mango, Antioquia, hasta convertirse en un referente del fútbol nacional e internacional, Muñoz es la muestra de que los sueños se pueden lograr sin olvidar sus raíces.
"Lo primero es ser buena persona"
“Aparte de ser futbolista, primero es persona”, es la premisa que se repite a diario, además de agradecer a Dios por abrirle las puertas de los lugares a los que ha llegado con esfuerzo, dedicación y entrega.
En sus palabras, destaca la importancia del trabajo constante y la fe. A sus 29 años, el futbolista mantiene ambiciones claras: "Yo sueño con llegar a los equipos más grandes del mundo, jugar un mundial o dos, o no sé si tres, jugar la Champions League, quedar campeón de no sé cuántos títulos".
Recordando su infancia, Daniel revela una pasión inesperada: "Cuando yo tenía 4 o 5 años, yo vivía en El Mango y ahí mi pasión eran los caballos. Tenía un caballito en el que andaba para arriba y para abajo".
Sus anécdotas contrastan desde la emoción con la figura que es hoy: uno de los jugadores más importantes y reconocidos de la Selección Colombia de mayores.
Muñoz devuelve a Amalfi con ayuda
Consciente de su posición privilegiada, Muñoz fundó la corporación Los Felinos, que actualmente beneficia a cerca de 500 niños de Amalfi que sueñan seguir sus pasos en el deporte.
El apoyo institucional ha sido fundamental en este proyecto. La Gobernación de Antioquia soporta su proyecto e impulsa la idea de formar jóvenes que puedan explotar sus capacidades deportivas sin perder el rumbo y el orgullo por sus raíces.
La historia de Daniel Muñoz no solo inspira a jóvenes futbolistas, sino que también ejemplifica cómo el éxito deportivo puede traducirse en desarrollo comunitario. Su compromiso con Amalfi y la región antioqueña refleja una visión que va más allá de los logros personales, contribuyendo al progreso social a través del deporte.


