Niños de Tres Bocas, en el Catatumbo, sueñan con ser futbolistas para alejarse de la guerra
Los menores quieren estar alejados de la violencia y gracias al trabajo de líderes y habitantes construyen una nueva historia inspirados en el deporte.
En el corregimiento de Tres Bocas, en el Catatumbo, los niños quieren estar alejados de la guerra y gracias al trabajo de líderes sociales y habitantes de la región, ahora construyen una nueva historia inspirados en el deporte.
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Y es que los 36 grados de intenso sol no son impedimento para que un grupo de 50 niños practiquen fútbol. Su sueño es convertirse en las próximas estrellas del deporte colombiano.
"Aquí la misma comunidad se encarga de mantener un escenario de estos, y nosotros mismos, o sea, el profe ‘juancho’ y mi persona, le estamos colaborando a ellos para que más adelante haya un futuro para ellos, salga un jugador profesional", dijo Luis Antonio Riveros, entrenador de fútbol.
Todos los niños que participan en actividades deportivas en Tres Bocas, corregimiento situado en la frontera con Venezuela, tienen el mismo propósito: alejarse de la violencia para poder cumplir sus sueños.
"Bueno, a todos los niños que salgan adelante, que cumplan sus sueños, sus metas, que salgan por la pasión al fútbol y muchas cosas más", precisó Alexander Estevez Vera, niño beneficiario.
El Catatumbo, históricamente ha sido escenario de violencia, por eso líderes sociales piden que se le apuesten más a estas iniciativas para construir paz.
"Consideramos que espacios deportivos como el de Tres Bocas son necesarios e indispensables para construir la paz que soñamos, nuestros niños merecen vivir su niñez, recrear sus mentes y ocupar sus espacios libres para fomentar el amor al deporte", señaló Tatiana Gaona, lideresa social.
En Tres Bocas al igual que en el resto del Catatumbo, quieren narrar una historia distinta a la de la guerra, sueñan con ser reconocidos por su pujanza y el gran potencial de la tierra, que tiene mucho que aportar a la paz del país.
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