Como consecuencia de la ola invernal niños tuvieron que graduarse en canoas

Pueblo Nuevo es la zona más inundada en el municipio de Hatillo de Loba, sur de Bolívar, y en el que recientemente los alumnos de la escuela rural tuvieron que graduarse en canoas. 

Los menores nunca perdieron clases y contra todo pronóstico, recibieron su certificado, algo que los motiva a seguir esforzándose por tener una mejor educación. 

Algunas imágenes conocidas por Noticias RCN dejan ver cómo la profesora de preescolar, orgullosa y con remo en mano, lleva su canoa para que sus alumnos reciban el grado con su toga y birrete, ese símbolo educativo que a pesar de las inundaciones se celebró con todos los honores. 

“A raíz de la ola invernal hemos tenido muchas dificultades con nuestros estudiantes para que puedan tener un desarrollo normal de sus aprendizajes, ya que los hogares están inundados. Los lugares donde se encuentran han sufrido mucho, las carreteras, las vías. Ellos tienen que trasladarse incluso en canoas para llegar a nuestras instituciones y es loable todo el esfuerzo que ellos hacen porque en verdad quieren aprender”, señaló Luz Carime Parra, profesora en el sur de Bolívar. 

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Es importante mencionar que, durante los últimos 6 meses de 2022, los más de 200 alumnos de la escuela rural de Pueblo Nuevo, llegaban a recibir sus clases en canoas porque el río Magdalena mantiene inundada toda la población. 

"Fue una conmovedora escena"

“Estos niños dieron una conmovedora escena al llegar a su escuela casi hundida en una canoa, una imagen inolvidable. Esta comunidad se encuentra aún bajos las aguas, sumamente pobres y estos niños demostraron que, con tesón, con ganas, con el esfuerzo de su corazón, lograron lo que querían, su graduación. Ellos querían usar su birrete, querían usar su toga y así llegaron como lo ven en las imágenes”, añadió Javier Polo, padre de familia, escuela rural, pueblo nuevo. 

Los niños que recibieron su grado en medio de las inundaciones fueron, además, homenajeados por la comunidad educativa y padres de familia porque, a pesar de todas las dificultades, lograron las mejores calificaciones.

“Es lastimosamente lo que estamos observando con nuestros niños, los sacrificios que ellos hacen en esta ola invernal. Sus familias no cuentan con ese apoyo de nuestro Gobierno, es importante que nos echen una mirada”, agregó Liliana Crespo León, docente rural. 

La riqueza educativa que existe en las zonas más apartadas del país es la garantía de mantener un equilibrio en la enseñanza que imparten los docentes que sortean cualquier dificultad para que sus alumnos sean los mejores.

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