Juanfer Quintero rompe el silencio tras la arenga viral que calentó el clásico entre América y Cali
Juan Fernando Quintero emitió un comunicado tras la polémica arenga previa al clásico ante el Cali, donde dijo “pisémosles la cabeza”.

Noticias RCN
05:23 p. m.
Luego de que se viralizara su encendida arenga previa al clásico entre América de Cali y Deportivo Cali, el capitán escarlata, Juan Fernando Quintero, decidió emitir un comunicado oficial para aclarar su postura.
El mediocampista habló directamente desde sus redes sociales, tras la polémica que generó entre hinchas rivales su mensaje dentro del camerino.
En el video, grabado minutos antes del partido que América ganó 2-0, se escucha a Quintero arengando a sus compañeros con frases como: “Cabeza fría y corazón caliente, muchachos. Los clásicos no se juegan, se ganan. Aquí tenemos la oportunidad de pisarles la cabeza. No pueden tener más ganas que nosotros, les deben dos meses”.
El mensaje, aunque motivacional para ellos, fue interpretado por muchos hinchas del Cali como un llamado a la agresividad.
Explicación de Juan Fernando Quintero
Tras la repercusión, Juanfer no tardó en pronunciarse. En su comunicado aclaró que sus palabras fueron parte del lenguaje interno de competencia dentro del grupo y que jamás tuvo intención de incitar a la violencia.
“Nuestra cultura, nuestro espíritu competitivo, nuestro léxico al interior del grupo es claro y contundente: ¡¡COMPETIR PARA GANAR!!”, expresó el 10 de América.
Además, pidió disculpas en caso de que sus palabras fueran malinterpretadas:
“Aclaro también que no promuevo la violencia ni algo por el estilo. El fútbol nos une, es un deporte competitivo y de estrategia”.
“Si mis palabras fueron mal interpretadas, ofrezco disculpas. Esa no era la intención; es la mentalidad con la que vivimos a diario, competir para ganar”.
Juan Fernando Quintero cerró su mensaje reiterando su compromiso con sus compañeros y su papel como líder en el vestuario: “Siempre dar lo mejor a mis compañeros e inculcar esto a TODOS”.
La controversia parece quedar atrás, pero el episodio confirma una vez más que cada gesto dentro del fútbol profesional puede escalar más allá del campo.