Navidad sostenible: Colombia cierra el año con un salto de 400 % en energías limpias y más de 250 MW en operación
Colombia destaca como uno de los líderes emergentes en la transición energética en Latinoamérica.
Noticias RCN
08:15 a. m.
En un contexto donde América Latina acelera su transición energética, Colombia se destaca como uno de los líderes emergentes en la transición energética en Latinoamérica, el país proyecta un crecimiento del 400 % en capacidad solar y eólica para 2030, abriendo oportunidades para miles de empleos verdes.
Con un alto potencial en energía solar, eólica e hidráulica, Colombia vive un momento crucial para acelerar su transición energética. En los últimos cinco años, el país ha cuadruplicado su capacidad instalada en fuentes no convencionales de energías renovables, pasando de menos de 50 MW en 2020 a más de 250 MW en 2025.
Sin embargo, el desafío sigue siendo enorme: según la UPME, el 66 % de la matriz energética aún depende de fuentes hídricas vulnerables al cambio climático, lo que subraya la necesidad de diversificar con fuentes más estables y sostenibles.
Según el Bloomberg NEF Climatescope 2024, Colombia ocupa el cuarto lugar a nivel mundial entre los mercados emergentes que más impulsan la transición energética, y es uno de los tres países latinoamericanos mejor posicionados junto a Chile y Brasil. Con un puntaje de 2,41 sobre 5, lo que evidencia que el país está por encima del promedio regional en políticas de energía limpia y se prevé que hacia 2025 las tecnologías renovables no convencionales representen alrededor del 12 % de la capacidad instalada, frente al 10 % estimado para 2024. Este avance responde a políticas públicas, inversiones privadas y la participación activa de empresas locales comprometidas con el desarrollo sostenible.
"Apostarle a esta transformación energética no solo representa una respuesta a la crisis climática global, sino una oportunidad económica tangible. En Colombia, se estima que por cada megavatio (MW) instalado en energías renovables se generan entre 5 y 7 empleos directos, impulsando el crecimiento del empleo formal en regiones apartadas. Además, la transición contribuye a una reducción progresiva de los costos energéticos, mejora la calidad del aire y fortalece la salud pública en zonas urbanas e industriales”, aseguró Edwin Hernández, CEO de Ecoled, empresa colombiana que este año ha sido galardonada en distintos escenarios nacionales e internacionales, gracias a su contribución estratégica al desarrollo sostenible en Colombia y América Latina.
En este contexto, empresas como Ecoled juegan un papel clave en la implementación de soluciones sostenibles y tecnologías limpias. Desde su experiencia en eficiencia eléctrica y energía renovable, Ecoled ha sido reconocida en escenarios internacionales por su contribución al desarrollo sostenible.
Según la IEA, en 2021 las energías renovables representaron ya el 25 % del suministro energético total del país, y el 29 % del consumo final. Además, el país depende en un 75 % de la generación hidráulica, lo que subraya la necesidad de diversificar hacia fuentes renovables como solar y eólica.
"Colombia tiene todo para liderar la transición energética en América Latina: recursos naturales, talento técnico y empresas comprometidas con la innovación sostenible. Nuestro papel como país es demostrar que la transición no es un lujo, sino una oportunidad real para crecer de forma limpia y competitiva”, afirmó Hernández, quien recientemente recibió una invitación oficial al Congreso de Estados Unidos para exponer proyectos de energía limpia y el reconocimiento del Concejo de Bogotá por su aporte a la sostenibilidad empresarial.
Con una visión estratégica que une desarrollo económico, innovación tecnológica y responsabilidad ambiental, Colombia avanza con determinación hacia un modelo energético más justo, limpio y resiliente, reafirmando su papel como uno de los líderes regionales en sostenibilidad. El país avanza hacia un modelo más limpio, eficiente y sostenible que busca reducir su dependencia de los combustibles fósiles y fortalecer su autonomía energética.
Apostarle a este cambio significa reducción de costos energéticos a mediano y largo plazo, mayor independencia frente a los combustibles fósiles, generación de empleo formal: se estima que por cada MW instalado en renovables se crean entre 5 y 7 empleos directos, mejora en la salud pública y en la calidad del aire en zonas urbanas e industriales.
Contrario a la percepción de que es una opción costosa, se ha demostrado que la transición energética es viable y rentable. Gracias a modelos de financiamiento flexibles y soluciones adaptadas a cada contexto, hoy cualquier persona, comunidad o empresa puede acceder a tecnología limpia, de forma segura y con retorno de inversión garantizado.