EE. UU. acusó a instituciones financieras mexicanas de lavado de dinero para cárteles del narcotráfico
El Departamento del Tesoro estadounidense informó que las entidades habrían jugado un papel vital en la canalización de millones de dólares para grupos criminales con sede en México.
Noticias RCN
10:11 p. m.
El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este miércoles la imposición de restricciones a las instituciones financieras mexicanas CIBanco, Intercam y Vector, tras acusarlas de participar en operaciones de lavado de dinero vinculadas a cárteles del narcotráfico mexicanos.
Estados Unidos lanzó una fuerte acusación contra tres instituciones financieras mexicanas
La medida, impulsada por la Red de Control de Delitos Financieros, busca frenar el flujo de recursos que facilitan la producción y distribución de fentanilo, un opioide sintético cuya crisis ha dejado casi 50.000 muertes por sobredosis en EE. UU. durante 2024.
En un comunicado oficial, el Departamento del Tesoro estadounidense informó que las tres entidades habrían jugado un papel “vital” en la canalización de millones de dólares para grupos criminales con sede en México, facilitando incluso la compra de precursores químicos provenientes de China para la fabricación del fentanilo.
• CIBanco, con más de 7.000 millones de dólares en activos.
• Intercam, que administra alrededor de 4.000 millones de dólares.
• Vector, firma de corretaje con cerca de 11.000 millones de dólares bajo gestión.
El subsecretario del Tesoro, Michael Faulkender, detalló en rueda de prensa varios ejemplos que sustentan la acusación. Entre ellos, destacó que en 2023 un empleado de CIBanco facilitó la apertura de una cuenta bancaria con el objetivo de lavar 10 millones de dólares para un integrante del Cártel del Golfo.
Además, reveló que ejecutivos de Intercam se habrían reunido con miembros del mismo grupo criminal en 2022 para discutir esquemas de lavado de dinero, incluyendo la transferencia de fondos desde China.
En el caso de Vector, FinCEN documentó que entre 2013 y 2021, un supuesto miembro del Cártel de Sinaloa utilizó diferentes métodos para blanquear al menos 2 millones de dólares a través de esta firma.
Aunque no se trata de sanciones económicas al estilo de las impuestas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), FinCEN determinó restricciones a ciertas transferencias de fondos que involucren a estas entidades.
En esencia, estas instituciones quedan limitadas para realizar determinados movimientos financieros con contrapartes estadounidenses.
“Estas entidades no podrán hacer negocios con nosotros en ciertos términos”, declaró Faulkender. Sin embargo, se aclaró que las filiales en el extranjero de estas instituciones podrán seguir operando si demuestran ser estructuras separadas e independientes de las matrices señaladas en México.
La Secretaría de Hacienda de México reaccionó con molestia ante el anuncio, señalando que hasta el momento el gobierno estadounidense no ha entregado pruebas concretas de los supuestos vínculos delictivos.
“Queremos ser claros: de contar con información contundente que pruebe actividades ilícitas de estas tres instituciones financieras, actuaremos con todo el peso de la ley; sin embargo, a la fecha no contamos con ninguna información en este sentido”, expresó el ministerio en un comunicado.
Estas acusaciones se producen en un contexto de crecientes tensiones bilaterales, donde la administración Trump ha mantenido una postura crítica hacia el manejo del narcotráfico en México y ha intensificado sus medidas, como la reciente imposición de aranceles al país vecino, bajo el argumento de que no está haciendo lo suficiente para frenar la crisis del fentanilo.
El caso podría escalar en las próximas semanas, dependiendo de si EE. UU. presenta más pruebas o si se abre un canal de cooperación judicial y financiera entre ambos países para esclarecer los señalamientos. Por ahora, las instituciones mexicanas afectadas enfrentan un duro golpe a su reputación en los mercados internacionales.

