Falso refugio resguardaba más de 470 animales exóticos protegidos: tenían fachada de ONG
Cuatro personas están siendo investigadas por tráfico ilegal de fauna.
Noticias RCN
AFP
07:56 p. m.
La Guardia Civil española anunció este sábado un operativo que destapó un falso refugio de animales exóticos, ubicado en Burgohondo, una localidad de la provincia de Ávila.
El lugar funcionaba como un aparente centro de rescate administrado por una supuesta ONG que, según la investigación, utilizaba redes sociales para promover donaciones y visibilizar su labor.
La intervención se dio tras una investigación iniciada en junio de 2023, cuando agentes del Instituto Armado detectaron irregularidades en publicaciones digitales que levantaron sospechas sobre el origen de los animales y el funcionamiento del supuesto refugio.
Falso refugio resguardaba más de 470 animales exóticos protegidos
En el operativo, la Guardia Civil intervino un total de 472 animales exóticos protegidos, entre los que se encontraban especies de alto valor ambiental y económico, como tortugas leopardo, tortugas de espolones, tortugas mediterráneas, iguanas, distintos tipos de gecos, tarántulas y varanos del Nilo.
El valor estimado de todos los ejemplares asciende a 85.000 euros.
Las autoridades señalaron que ninguno de los animales contaba con documentación o trazabilidad legal, y que muchos provenían de cesiones irregulares.
Aunque los ejemplares fueron encontrados en condiciones aceptables, su presencia en el lugar constituía una vulneración grave de las normativas de protección animal y comercio de especies.
Como resultado de la operación, cuatro personas fueron puestas bajo investigación por su presunta pertenencia a una organización criminal que gestionaba el tráfico ilegal de estos animales.
Falso refugio de animales exóticos recibía donaciones
Los agentes también confirmaron que la supuesta ONG utilizaba donaciones captadas a través de redes sociales para financiar la manutención de los animales, ofreciendo difusión y publicidad a cambio de aportes económicos.
Sin embargo, el refugio operaba sin licencias, sin permisos de funcionamiento y sin los registros exigidos para la tenencia de especies exóticas protegidas.
Además, aunque los animales no presentaban signos de maltrato, las instalaciones tampoco cumplían con las regulaciones para albergarlos.

