EE.UU. fortalece las reglas migratorias: así funcionarán las leyes de deportación
Desde suelo americano han implementado diferentes procesos para tener un mayor control.
Noticias RCN
07:51 a. m.
El panorama migratorio en Estados Unidos ha experimentado una transformación radical en 2025, tras la implementación de una serie de órdenes ejecutivas y cambios regulatorios que endurecen significativamente las leyes de deportación.
En un esfuerzo significativo por reforzar la seguridad fronteriza y optimizar la aplicación de las normas de inmigración, el Gobierno federal de Estados Unidos ha implementado a lo largo de 2025 una serie de directrices y procedimientos acelerados que endurecen de manera notable su política migratoria.
Estas nuevas normativas, impulsadas principalmente por la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), impactan directamente en la vida de miles de migrantes que residen de forma irregular en territorio estadounidense, incluyendo tanto a indocumentados como a aquellos que excedieron el tiempo permitido por sus visas.
La base legal sigue siendo la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA) de 1952, pero los cambios de 2025 han redefinido el alcance del sistema migratorio, potenciando la coordinación entre agencias como ICE, DHS, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y la Administración de Servicios de Ciudadanía e Inmigración (USCIS).
Reglas para control migratorio en Estados Unidos
Una de las disposiciones más relevantes que entró en vigor en enero de 2025 es la instrucción del DHS a todos los extranjeros de cumplir con la obligación de registrarse formalmente, según lo estipula la sección 262 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad. Para facilitar el trámite, se puso a disposición el formulario G-325R.
Las autoridades federales han sido claras en que el incumplimiento de esta obligación constituye un motivo para iniciar acciones civiles y penales, marcando un claro foco en la verificación del estatus legal de la población migrante.
De forma paralela, se ha intensificado el escrutinio sobre las personas que ingresaron al país con una visa temporal y excedieron el período de permanencia autorizado. CBP, ICE y USCIS han desplegado operativos especiales para identificar casos de permanencia irregular, una medida que se fortaleció tras diversos incidentes de seguridad reportados durante el año.
Estas revisiones han afectado a ciudadanos de múltiples países, con un impacto significativo en poblaciones originarias de América Latina.
El fortalecimiento de la política migratoria se ha traducido en un incremento notable en las cifras de aplicación de la ley. La Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) reveló que, tan solo durante los primeros 100 días de 2025, se arrestó a 66.463 personas en situación migratoria irregular y se completó la remoción (deportación) de 65.682 extranjeros.
Es importante destacar que, de acuerdo con las cifras oficiales, las tres cuartas partes de estos individuos contaban con antecedentes penales previos.

